Tras votar a favor de la reforma que amplía el período de la próxima gubernatura, los catorce diputados del Partido Acción Nacional (PAN) y los cinco del Partido Revolucionario Institucional (PRI) tendrá como consecuencia la expulsión o investigación, anunciaron sus dirigencias.
Minutos después de que se aprobó la modificación, Marko Cortés Mendoza, presidente nacional del PAN, anunció que los legisladores de su Partido serán expulsados al considerar que fueron corrompidos por Morena.
Por su parte, José Luis Ovando Patrón, dirigente estatal del Partido blanquiazul, confirmó que los doce diputados panistas recibieron la instrucción de no presentarse a la sesión, pero solo dos acataron la orden.
“Había instrucciones claras y precisas de la dirigencia estatal y nacional de que no se permitirían este tipo de modificaciones ilegales, por lo tanto desacataron en una circunstancia ventajosa porque mintieron hasta el último minuto de lo que ocurriría”.
El líder estatal panista adelantó que seguramente vendrán justificaciones de parte de algunos diputados, sin embargo el Partido no podrá minimizar el comportamiento que consideran una traición.
Por su parte, Claudia Ruiz Massieu, dirigente nacional del PRI, también hizo público su rechazo a la reforma que amplía el período de la próxima administración estatal y adelantó que en caso de proceder se interpondrá un recurso ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
En el Senado de la República, el priísta Miguel Ángel Osorio Chong, criticó fuertemente la actitud de los diputados incluyendo a los de su Partido al prestarse a un acto ilegal y de corrupción.
“Hay que señalarlos y me refiero a los de mi Partido y hay que ver si aquello que anda en el rumor público de que recibieron recursos para otorgar su voto, que puedan ser sancionados y castigados conforme a la ley y al interior de cada Partido, no va a quedar así”.
Osorio Chong también criticó al gobernador electo Jaime Bonilla Valdez, quien consideró debería estar ocupado en diseñar el plan estatal de desarrollo con el que tomará las riendas de un Estado que enfrenta graves problemas sociales, económicos y de seguridad.