El temor de ser detenidos por alguna autoridad de seguridad hace que las personas en condición de calle o contexto de migración se resisten a acudir a los refugios que el gobierno municipal mantiene activos por la temporada de calor.
Elba Cornejo Arminio, directora del DIF Municipal, reconoció que es frecuente esa falsa creencia a pesar de que estos lugares se activan para inhibir muertes y enfermedades asociadas al comportamiento del clima.
“Tenemos rondines de seguridad pública y creen que por estar alcoholizados o bajo alguna droga los van a detener, pero nosotros lo que queremos es que no se mueran de calor, ese es el objetivo”.
Entre el albergue Peregrino y el de la colonia Nueva Esperanza son alrededor de 60 las personas que han sido refugiadas durante las horas pico del calor.
Cornejo Arminio dijo que la capacidad del DIF Municipal es para atender a un número todavía mayor pero persiste la negativa de parte de la población vulnerable de trasladarse a estos sitios.