Hace 51 años nació Palo Verde, una comunidad ubicada al Sur de la ciudad en el Valle de Mexicali, nombrada así por la cantidad de pinos salados, donde una vez a la semana acude una brigada médica para atender a la población.
Gracias al trabajo de tesis de una maestría, de una mexicalense estudiante de la Universidad de Arizona, así como de los clubes Rotarios de aquel estado y de Mexicali, fue posible la inauguración de dos consultorios médicos que atenderán no sólo a esta comunidad, sino a los residentes de los alrededores.
La comunidad recibe los servicios médicos de una brigada de la Secretaría de Salud del estado, que llega todos los miércoles a ofrecer consultas de medicina general, brinda tratamientos contra la diabetes e hipertensión, se ofrecen pláticas de planificación familiar, talleres.
María Luisa Alatorre Rangel, llegó en el año 1971 y es la fundadora de esta colonia, comentó que los servicios médicos se prestan en un cuarto que fue construido con apoyo de la comunidad, con materiales como tablas o cartón que la gente llevaba.
Sin embargo, considera de mayor importancia la construcción de estas dos clínicas para tener una mejor atención, y esperan tener un médico de forma permanente, ya que tienen que ir hasta la colonia Rivera Campestre para atenderse, y para ello se requiere de vehículo.
El pasado viernes y sábado, una cuadrilla de voluntarios de Rotarios de Mexicali, así como de Arizona, construyeron las dos clínicas, ambas de madera pero con piso de concreto, color azul rey, rematadas con detalles en amarillo, en las que solo falta la electricidad y el agua potable, de las que esperan haya médicos de forma permanente.
Paola Silva, ingeniera industrial y actualmente estudiante de la maestría en Comunidades Sustentables, de la Universidad del Norte de Arizona, explicó que este proyecto es parte de su tesis y se ha concretado a través de dos caminos, el primero es por la organización de los residentes del poblado, que hace 4 años construyeron un centro médico.
Y el segundo camino nace a través de la Universidad del Norte de Arizona, ya que junto con su compañero Leopoldo, aplicaron para recibir un apoyo para un proyecto de ayuda comunitaria, y en el cual resultaron ganadores, y buscaron una comunidad para llevar este beneficio.
Les comentaron de este poblado, donde ya se han realizado proyectos por parte del Club Rotario, por lo que ya cuenta con valores como tenacidad y ya saben cómo administrar proyectos y mantenerlos con vida a largo plazo.
Al visitar el lugar hace dos años, se percataron de que realmente necesitaban un centro de salud digno, con cualidades necesarias para llevar a cabo procedimientos médicos, así como privacidad y todo lo que conlleva.
“A través de dos años, estamos muy felices que a través de la colaboración que se llevó a cabo con la comunidad, con organismos como el Club Rotario de la ciudad de Mexicali, del Club Rotario de Escondido, California, y el Club de Leones de Washington, durante el fin de semana se llevó a cabo la construcción de dos clínicas médicas, aunque el plan original era de solo una.
“El presupuesto estimado fue de aproximadamente 45 mil dólares, estamos muy felices con los resultados pero cabe resaltar que todavía queda lo difícil que es mantener estas clínicas a largo plazo, y trabajar en otros temas pendientes como es identificar padecimientos relevantes para la comunidad que aún no son tratados y traducir estos padecimientos en insumos”.
La estudiante de maestría en Comunidades Sustentables, relató que han sufrido muchos altibajos, ya que originalmente el proyecto estaba para que se concretara en 6 meses, pero se extendió por 2 años, por lo que pensaban que no iba a suceder la instalación de la clínica, y entre estos problemas destaca la falta de apoyo del gobierno, como la conexión de energía eléctrica y agua potable.
Mencionó que también batallaron en conseguir un decreto actualizado por parte del gobierno que reconociera el estatus del terreno, que actualmente se encuentra como para beneficio de la comunidad.
Para cualquier persona interesada en el proyecto, para apoyarlos con los pasos adicionales, puede contactarla a través de correo electrónico, pms249@nau.edu, o también pueden acudir al poblado Palo verde, ubicado al Sur de la ciudad de Mexicali.