El impacto económico de la falta de accesos vehiculares de la garita Río Nuevo al Centro Histórico afecta a diversos sectores, no solo al médico, indicó la economista Alejandrina Barajas.
Destacó que los visitantes que llegan del norte derraman en consumo en el área de la salud, pero además en hoteles, alimentos y comercios.
Estos sectores de servicios cuentan con personal que labora en diferentes actividades bajo una demanda que puede verse afectada.
"Son multiplicadores, no solamente le pagan a los doctores, van a restaurantes; solo observa la cantidad de restaurantes que hay alrededor de la garita, chinos y de otros tipos. Entonces, todas esas personas al tener dificultades, al cambiarle la ruta habitual puede sentir inseguridad".
Dijo que por la ubicación del Distrito Médico, en las calles Madero, Reforma Obregón, se trata de un espacio estratégico que busca facilitar el acceso a los pacientes que vienen de California y Arizona.
Es por esto que no tener dos pasos a desnivel que conecten al puerto fronterizo oriente de manera eficiente es un error.
