Hotel del Norte, de la mano con Mexicali por más de 67 años

Cada rincón de nuestra ciudad, que hoy por hoy se encuentra celebrando 115 años de formación, está plagado de historia, de un legado que a lo largo de este tiempo ha dejado a miles de habitantes y a sus generaciones, herencia que en la actualidad podemos seguir contemplando y que es parte ya del patrimonio histórico de nuestra sociedad.

Era la década de los veinte en esta naciente ciudad, que a pesar de ser novel en su constitución era un importante punto en la que turistas extranjeros, quienes al ver que en esta ciudad colindante con el Estado de California se encontraban un sinnúmero de casinos en donde podían deleitarse con los juegos y con el alcohol, siendo aquella época la de la prohibición del elixir en Estado Unidos y encontraron en esta pequeña ciudad la oportunidad de divertirse, acción que apoyó la economía de ésta.

Turistas extranjeros viajaban intermitentemente hacia esta ciudad durante los años subsecuentes, tiempo en que se inició en la mente de la familia Ruiz, al ver el flujo de visitantes, la creación de lo que hasta el día de hoy ha sido considerado uno de los mejores hoteles de la ciudad y por el que han pasado grandes figuras de la política y del espectáculo, el Hotel del Norte.

Ubicado en el corazón del primer cuadro de la ciudad, en avenida Madero esquina con Melgar, este edificio inició su construcción en 1948, siendo concluida e inaugurada la obra el 1 de enero de 1951, tiempo en el que el centro de la ciudad se encontraba en todo su esplendor, donde familias de toda índole social paseaban por las calles de aquel centro en el que se percibía gente de trabajo que añoraba un mejor porvenir para los suyos.

Recuerdos invaluables son los que se perciben al rondar por los pasillos de los cuatro pisos con los que cuenta este afamado hotel, que al ser el único en su tipo en la década de los cincuenta y sesenta albergó a grandes personajes de la vida política, artística y cultural del país.

El medio del espectáculo fue el que más socorrió los servicios del Hotel del Norte, quien pudo tener en sus habitaciones a personajes internaciones como Libertad Lamarque, quien se hospedó en la habitación 101 o en la 110 al afamado músico del género del mambo, Dámaso Pérez Prado.

El mimo de México, Mario Moreno “Cantinflas” permaneció por varios días en la habitación 212, misma que al tiempo sería compartida con uno de los grandes personajes del cine mexicano, Pedro Infante. José Alfredo Jiménez, uno de los mejores compositores y cantantes que han emanado de tierras mexicanas también fue parte de los huéspedes ilustres de la habitación 104 de este hotel, así como Juan Gabriel que en la número 106 no dudan haya ideado alguna de sus múltiples y exitosas canciones.