Solo la garrapata dura o café que portan los perros, es la transmisora de la rickettsiosis, por lo que el parásito similar a este con el que cuentan algunas especies bovinas no es de riesgo para la trasmisión de esta enfermedad.
Daniela Miranda Guzmán, médico veterinario zootecnista adscrito al programa de Zoonosis estatal de la Secretaría de Salud, precisó que mucha gente ha sentido temor por vivir en los alrededores de rancho o empresas de productos cárnico donde se asientan decenas de vacas o becerros, que pueden transmitirles, a través de sus garrapatas, la rickettsia, lo cual es imposible.
Las garrapatas están divididas en dos partes, uno es el capítulo, que es como su estructura bucal y otra que es el cuerpo. Cuando tienen una capa que es más gruesa, éstas serán clasificadas como garrapata dura, y hay otras que no cuentan con esta capa, a las que se les denomina garrapatas blandas.
“Las garrapatas duras, como tienen esta capa, las protege y dentro de éstas está la familia ixodidae, que es donde esta garrapata café del perro; estas garrapatas tienen unas estructuras que le permiten perforar la piel para poder introducir su aparato bucal y empezar a succionar sangre”.
Manifestó que dentro de las especies blandas existen diferentes tipos, entre las que se encuentran las del bovino, las cuales, al no tener su aparato bucal desarrollado para perforar la piel de los humanos, no es transmisora de la rickettsia.
“La rickettsia, específicamente la que hemos encontrado aquí en Baja California, es transmitida por la garrapata café del perro”.