Aunque en Baja California la circulación de vehículos que carecen de identidad oficial es considerado por las propias autoridades como un problema que incluso permea en el ámbito de la seguridad, la realidad es que la dimensión de esta situación se desconoce.
En agosto del 2016, el Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Planeación y Finanzas (SPF) aplicó un censo vehicular exhortando a los propietarios de un auto “chocolate” a registrarse para obtener una cifra estimada de cuántos de estos vehículos había. Como resultado se obtuvo el registro de poco más de 24 mil vehículos, cifra que para algunos sectores fue alejada de la realidad.
En agosto del 2016, el Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Planeación y Finanzas (SPF) aplicó un censo vehicular exhortando a los propietarios de un auto “chocolate” a registrarse para obtener una cifra estimada de cuántos de estos vehículos había.
Como resultado se obtuvo el registro de poco más de 24 mil vehículos, cifra que para algunos sectores fue alejada de la realidad. Nolberto González Grajeda, director de Ingresos en el Estado, reconoció que el programa no fue bien visto por las autoridades federales que de hecho prohíben este tipo de mecanismos, tal como se prevé en el Convenio de Colaboración Administrativa.
En ese sentido, el Gobierno del Estado está impedido para obtener o dar cualquier elemento de identificación aunque sea por motivos de seguridad.
El tema de realizar un registro te dice claramente la cláusula del convenio que no puedes generar ningún registro de autos que no estén importados porque existe la obligación de las entidades federativas de decomisarlos.
El Gobierno de Zacatecas intentó también realizar un censo vehicular, sin embargo por estas restricciones no ha sido posible.
González Grajeda comentó que aunque la cifra obtenida en el censo del 2016 fue quizá menor, si otorgó rasgos para entender el problema estableciéndose que los propietarios de dichos autos ven inalcanzables los costos de importación.
Los ciudadanos no quieren estar en la ilegalidad, quieren tener placas, pero a costos razonables.
Como ejemplo dijo, están los vehículos modelos 2008 a 2012 que pagan el 1% de arancel más el 16% de IVA, se importan por un costo de hasta 2 mil dólares, mientras los vehículos fuera de ese rango pueden pagar hasta el 10% de arancel
González Grajeda indicó que el Gobierno del Estado insistirá para que el Gobierno federal revise los esquemas de importación en la franja fronteriza, zona que requiere atención especial al resto del país.