Desde que inició la pandemia por el Covid-19, para el trabajador del campo, Víctor Daniel García, ha sido extraño laborar con un distanciamiento social y con las medidas de higiene extremosas que han determinado las autoridades en todo el mundo.
El joven refirió que lleva cuatro años trabajando en la cosecha de distintos vegetales, entre estos la lechuga, brocoli, espinaca y alcachofa, para lo cual ahora debe de utilizar siempre cubrebocas y mantenerse a una distancia de al menos un metro y medio de separación con el resto de sus compañeros, quienes en su mayoría provienen del sur del país.
En la empresa donde trabaja también se ha visto afectada económicamente, toda vez que algunas semanas sí les han recortado las horas de trabajo, aunque también reconoció que han habido rachas de pedidos grandes, siendo la jornada máxima de trabajo de 12 horas.
Él vive actualmente en King City, California, en donde ha observado de primera mano que tan diferente se ve una ciudad californiana sin la imagen de las personas disfrutando su día al aire libre, tanto en las calles como en los parques públicos.
Al ser trabajador de una actividad esencial, explicó que la empresa para que trabaja desde que se le proporcionó el contrato de esta temporada se le informó cómo se trabajaría durante la pandemia, lo cual le da certidumbre a él y al resto de connacionales que laboran ahí.
“Lo importante es que está el trabajo; aunque está la pandemia, estamos trabajando, pero sí es algo muy diferente a lo que estamos acostumbrados”.
El contrato que tiene es por temporada, por lo que hasta noviembre estará en el vecino país. Mientras tanto, solo se comunica con su familia en Mexicali vía telefónica.
Tanto sus compañeros, como él, no piensan salir de Estados Unidos, dado que conocen que existe una restricción en el acceso a las garitas, por lo que de salir, temen que les nieguen el acceso para volver a ingresar.
“Antes se caminaba como si nada con cubrebocas y ahora sin esas medidas no se puede salir.”