/ domingo 16 de diciembre de 2018

Es Don Aarón un personaje de Pueblo Nuevo

Como responsable de la farmacia siempre ha ayudado a quien lo necesita

Aarón Noyola García es uno de los pilares de la colonia Pueblo Nuevo, al ser dueño de la farmacia más antigua de esta demarcación.

Desde hace 68 años está al frente del mostrador de la Farmacia Unión, ubicada entre el callejón Guanajuato y la calle Salina Cruz.

Desde el exterior de este comercio, en la fachada verde se puede notar que miles de historias han cruzado por esta esquina, unos buscando algún remedio o medicamento para aliviar un dolor o molestia, aunque otros también caminan por esta manzana buscando el apoyo de don Aarón.

Uno de sus objetivos personales es ayudar a la gente siempre que está en sus manos, por lo que en ocasiones ni siquiera les cobra a los enfermos que buscan una medicina para aminorar el padecimiento que los aqueja en ese momento.

El hombre de familia ha aprendido el oficio sobre la marcha, tras atender las dudas de cientos de visitantes, que en su mayoría se trata de personas de escasos recursos.

Recuerda que había unos jóvenes que lo visitaban en la farmacia, quienes se lamentaban que no les alcanzaba para seguir estudiando.

Don Aarón los motivó a continuar con sus estudios pese a las adversidades, por lo que les sugirió que pidieran apoyos a las Cámaras empresariales o incluso al Gobierno del Estado o al Ayuntamiento.

Fue grata su sorpresa al ser visitado recientemente por estos jóvenes que ya son todos unos profesionistas, por lo que le regalaron una bata nueva para agradecerle a don Aarón por haberlos motivado a continuar con su formación profesional.

Al tener esa grata visita, el hombre “cargó pilas” para continuar atendiendo el importante comercio que permite a los que menos tienen, adquirir un medicamento a un precio a su alcance.

Aarón Noyola García es uno de los pilares de la colonia Pueblo Nuevo, al ser dueño de la farmacia más antigua de esta demarcación.

Desde hace 68 años está al frente del mostrador de la Farmacia Unión, ubicada entre el callejón Guanajuato y la calle Salina Cruz.

Desde el exterior de este comercio, en la fachada verde se puede notar que miles de historias han cruzado por esta esquina, unos buscando algún remedio o medicamento para aliviar un dolor o molestia, aunque otros también caminan por esta manzana buscando el apoyo de don Aarón.

Uno de sus objetivos personales es ayudar a la gente siempre que está en sus manos, por lo que en ocasiones ni siquiera les cobra a los enfermos que buscan una medicina para aminorar el padecimiento que los aqueja en ese momento.

El hombre de familia ha aprendido el oficio sobre la marcha, tras atender las dudas de cientos de visitantes, que en su mayoría se trata de personas de escasos recursos.

Recuerda que había unos jóvenes que lo visitaban en la farmacia, quienes se lamentaban que no les alcanzaba para seguir estudiando.

Don Aarón los motivó a continuar con sus estudios pese a las adversidades, por lo que les sugirió que pidieran apoyos a las Cámaras empresariales o incluso al Gobierno del Estado o al Ayuntamiento.

Fue grata su sorpresa al ser visitado recientemente por estos jóvenes que ya son todos unos profesionistas, por lo que le regalaron una bata nueva para agradecerle a don Aarón por haberlos motivado a continuar con su formación profesional.

Al tener esa grata visita, el hombre “cargó pilas” para continuar atendiendo el importante comercio que permite a los que menos tienen, adquirir un medicamento a un precio a su alcance.

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