El abuso sexual emitido a un animal por un humano (zoofilia) es calificado como maltrato, por lo tanto, es considerado un delito que se castiga con sanciones económicas y hasta con cárcel, según lo establezca la autoridad correspondiente.
En el transcurso de la presente semana se dio a conocer a través de los medios de comunicación el caso de una perra que fue agredida sexualmente por un varón, quien al parecer le introdujo un palo en la parte íntima.
Según se informó fueron los mismos vecinos del lugar donde se tenía a la perrita los que denunciaron el mal trato que estaba recibiendo el animal que ahora está en resguardo en un refugio para canes de la capital bajacaliforniana.
Al respecto, la encargada del Centro de Control Animal (CCA) de San Luis Río Colorado, Irma Lucía Álvarez, indicó que en los 3 años que lleva al frente de esta institución no ha recibido reportes de zoofilia.
Al momento de reportar ante el CCA o interponer la denuncia formal en la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común (AMPFC) es necesaria la entrega de evidencias, por ejemplo, fotografías o videos.
Irma Lucía Álvarez destacó que uno de los pronunciamientos que hizo un oficial de la Procuraduría de Justicia de Baja California, al referirse al asunto de la perrita afectada, es que dichas pruebas, ya sean las fotos o videos, no deben ser publicadas en redes sociales, pues solo deben proporcionarse a la autoridad correspondiente para dar inicio a una investigación y, posteriormente, de ser necesario, proceder conforme lo establece la Ley.
Subrayó que dentro del Código Penal en el artículo 342 refiere el tema del maltrato animal, tipificándolo como un delito.
Las personas que deseen reportar cualquier tipo de agresión animal, incluyendo la zoofilia, pueden acudir al CCA ubicado en la avenida Revolución y calle 20, en donde se les indicarán los pasos a seguir para hacer la denuncia ante el Ministerio Público.
Un animal que es agredido sexualmente, hembra y macho, pueden sufrir lesiones en su aparato reproductor en partes como la vulva o cérvix, además presentar traumas, volviéndose desconfiados y a veces agresivos con las personas que se les acercan.
También un perro o cualquier otro animal al que le sea introducido un objeto como sucedió con la perrita de Mexicali, corren el riesgo de morir, por lo que recomendó a los propietarios de mascotas que las cuiden.
“La recomendación que hago es no dejar que nuestras mascotas anden en la calle para evitar riesgos, lo mejor es mantenerlos en resguardo dentro de los patios”, concluyó Irma Álvarez.
