Aprovechando el buen clima dominical, decenas de familias se congregaron en el nuevo mirador de La Rumorosa, donde aprovecharon para tomarse autorretrato, o simplemente para conocer esta parada y disfrutar del paisaje con los más pequeños.
Aunque no ha sido inaugurado de manera oficial el mirador, ya se está abierto al público, encontrándose en una estructura metálica que sobresale de un barranco de La Rumorosa, al caminar se puede sentir el bamboleo que le otorga la flexibilidad de sus materiales.
Ubicado en el kilómetro 54 de la carretera La Rumorosa-Mexicali, el nuevo mirador comparte espacio con las letras de la sierra, así como con la escultura del caballo blanco, de un famoso corrido del compositor guanajuatense José Alfredo Jiménez.
También cuenta con información sobre la creación del mundo según los Kiliwas, en la que el coyote en su soledad, juega un papel central en lo que hoy es el universo.
El binocular fue de los más solicitados, por los visitantes, tanto los más pequeños como sus padres, echaban una mirada con la herramienta óptica que apunta hacia el Poniente, en el cual se puede observar la granja solar, y si se pone más atención, hasta la ciudad de Mexicali.
El mirador se ha convertido en una atracción más de La Rumorosa, que ha sido del gusto de chicos y grandes por igual, parada casi obligada para quienes van de viaje, hasta para los ciclistas que toman un respiro de su actividad física.