La conmemoración del Día Escolar de la no Violencia y la Paz, es un recordatorio para continuar cumpliendo con los roles para la erradicación de la violencia tanto en el ámbito familiar, escolar y social, manifestó Angélica Oblea Morales, psicóloga de la escuela de educación especial, Jumpers Mexicali.
La violencia escolar se clasifica en tres tipos; acoso escolar, maltrato escolar y abuso sexual, los cuales se pueden desarrollar justamente en un ámbito escolar, ya sea el aula, el área de recreo, el comedor, entre otros lugares dentro de una institución educativa.
ACOSO Y MALTRATO ESCOLAR:
En el acoso escolar, el niño puede aparecer con marcas inexplicables en su cuerpo regularmente, así como rotura de ropa, pérdida de dispositivos electrónicos u otros objetos, lo que puede generarle dolor de cabeza o de estómago incluso sentirse enfermo creando una ansiedad.
En ese sentido, también pueden tener pérdida del apetito recurrente o tener atracones de comida, así como sueño recurrente, terror nocturno frecuente, por lo cual deben estar atentos tanto padres de familia como maestros de estos síntomas.
ABUSO SEXUAL INFANTIL:
Lo primero que le sucede a un niño con abuso sexual es que se les va a el apetito, llantos muy frecuentes sobre todo cuando se trata de tener un tacto con él, así como cuando ven cuestiones que tiene que ver con lo erótico, puede ocasionarles llanto.
Les puede dar miedo estar solos con algún miembro de la familia o con alguno de los dos progenitores, así como cambios bruscos de conducta puede que no fuera muy sociable y de pronto ya lo es, o viceversa, por lo cual todas estas características son alarmas.
“La cultura de la prevención porque aunque en las escuelas hay grupos muy numerosos de niños, lo cual les cuesta mucho trabajo a los maestros, en los aspectos informativos, preventivos y correctivos, que son las tres áreas”, añadió.
Indicó que en la Organización para la Cooperación del Desarrollo Económico en México (OCDE) se evaluó a México en 2017 como el primer lugar de los primeros cinco países con mayor grado de violencia en el mundo en los ambientes escolares.
“A partir de entonces, el Instituto de la Juventud fue quien empezó a crear las primeras maneras de atender este problema en el ambiente escolar, pues a partir de esa fecha es cuando ya empieza a sonar en nuestro país”.
Así mismo, explicó que según datos proporcionados en 2018 por parte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en ese entonces el 32.2% de la población entre 12 y 18 años fueron víctimas de bullying, que son jóvenes de primaria, secundaria y preparatoria.
PROTOCOLO ESCOLAR 2023
Actualmente existe un protocolo escolar el cual salió en el 2023 expedido por la Secretaría de Educación Pública (SEP) por un crecimiento en denuncias de abuso escolar en un 500%, por lo cual las escuelas tienen acceso a dicho documento para saber atender los problemas de bullying en el ambiente escolar.
“Este documento tiene que ver con nuestra constitución en el artículo tercero donde dice que debe garantizar la educación a nuestros niños, pero también garantizar su integridad física, moral y psicológica en las primeras etapas; preescolar, primaria, secundaria y preparatoria”.
Angélica Oblea expresó que ahora el niño debe de aprender de manera integral cubriendo la parte social, el cual era un tema que antes no se hacía, sobre convivencia e interacción, porque los temas de violencia no tienen un origen en las escuelas, sino en el ambiente familiar.
PANDEMIA Y AMBIENTE FAMILIAR
La psicóloga informó que a raíz de la pandemia se presentaron secuelas económicas, físicas y sociales en los jóvenes, ya que a través de pantallas comenzaron a aprender teniendo una convivencia solamente con sus núcleos familiares.
“Los excluimos de la convivencia y la interacción sociales y el ser humano por naturaleza es un ser social, es decir, que parte del crecimiento, aprendizaje y desarrollo psicoemocional de un ser humano desde que nace hasta que muere es la interacción social”, indicó.
En ese sentido, comentó que con los casi dos años de pandemia, muchos niños volvieron a las escuelas sin habilidades sociales, ya que muchos no habían convivido nunca con otros niños, o algunos se les olvido, incluso muchos fueron víctimas de violencia familiar.
“En ese tiempo se incrementaron los casos de divorcios, de violencia familiar y de violencia sexual en los niños desde las familiar, muchos niños entonces llegan con esas características a los entornos escolares y obviamente nos preguntamos que esta pasando”.
CAUSAS
Los niños que tienen aptitudes de violencia hacia otros niños o maestros regularmente vienen de entornos familiares violentos o de familias con características de desintegración; familias compuestas, niños que los cuidan otros familiares menos papá y mamá.
“Así como, con mamás que trabajan todo el día y deben dejarlos en guarderías, luego lo dejan con una tía, el niño anda en muchos ambientes y para un menor su ambiente debe preservarse física, social y espiritualmente, entonces cuando están de arriba a abajo, pueden entrar en una condición de riesgo”, puntualizó.
Cuando se atiende psicológicamente a un niño lo primero que se atiende es el ambiente familiar, ya que una vez que llegan a los centros escolares el problema ya lo traen, es por ellos que es importante prevenir la violencia en general desde casa.
“De 10 niños 7 han sufrido algún tipo de violencia en general, es importante conocer cuales son los efectos y ver como trabajar desde los ambientes escolares ya que el primer vínculo es la familia, en donde se tienen que empezar a aprender las habilidades sociales”.
INJUVE
Diana Pérez Madueño, jefa del departamento de Atención Integral a la Juventud del Instituto de la Juventud (INJUVE) mencionó que por parte del instituto se atiende el tema de la erradicación de la violencia en los jóvenes de 12 a 29 años.
Indicó que la meta anual del INJUVE es la atención de cerca de 13 mil jóvenes con el programa “Jóvenes con Corazón”, en donde se imparten talleres, conferencias, foros abiertos de comunicación con el propósito de educar en materia de prevención de la violencia.
“La plática se llama Violencia Cero con la que se les hace una psicoeducación con el tema de la prevención de la violencia, en donde hay cero tolerancia a todas esas agresiones que viven en los jóvenes, como el tema del bullying”, agregó.
La titular comentó que el alcance de dicho programa va dirigido a secundarias y preparatorias con el objetivo principal de erradicar la violencia y darle pautas a los jóvenes cuando se encuentren en una situación donde se pueda desencadenar actos violentos.
“Que si me estoy poniendo tenso, si estoy queriendo empujar a mi compañero, que herramientas y qué límites puede establecer, por que a final de cuentas violencia genera violencia”, añadió.
En ese sentido, Diana Pérez comentó que entre los jóvenes que atienden, cerca del 5% suelen comentar que viven una situación de violencia entre sus padres, sin embargo, por parte del Instituto no se van más a fondo en lo que pasa en sus familias.