La heroína se está mezclando con Benzodiacepina y Xilacina, potentes opioides y sedantes de uso veterinario y así las venden a las personas consumidoras en Mexicali, informó Lourdes Angulo Corral.
La directora de la asociación civil Verter, la cual busca reducir los riesgos por consumo de drogas, detalló que ellos analizan las sustancias que llevan las personas y desde junio y julio del año pasado empezaron a detectar dichas sustancias.
Indicó que aún se mantiene en el 100% de las dosis de heroína la presencia del fentanilo, pero ahora también aparecen los sedantes de uso veterinario antes mencionados.
“La heroína llega adulterada y así se las están vendiendo y algunos consumidores desconocen que está adulterada”, remarcó la entrevistada.
De acuerdo con la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), las benzodiacepinas pueden generar dificultad para respirar y en algunos casos la muerte.
La Xilacina es un sedante de uso veterinario no clasificado en opioide, pero no está aprobado para consumo humano, de acuerdo a información del Instituto Nacional de Abuso de Drogas en Estados Unidos (NIDA).
Desde el Instituto Nacional de Psiquiatría en México han realizado estudios sobre dosis en Mexicali, donde también detectaron la presencia de Xilacina en la heroína.
“Es un punto de alarma, es necesario revisar las sustancias y que las personas sepan qué están consumiendo”, dijo.
“INVISIBILIZAN” CONSUMO
Angulo Corral manifestó que en Estados Unidos han detectado que cuando hay una sobredosis con presencia de Xilacina, la Naloxona puede no funcionar y eso eleva el riesgo de muerte.
Al respecto, cuestionó al gobierno federal y estatal por qué no hay una política pública de salud para las personas con adicciones.
“El presidente (Andrés Manuel López Obrador) niega el consumo y hasta la producción de fentanilo, no hay una política nacional para el tema del fentanilo, no se aborda como tema de salud”, expresó.
“Lo invisibiliza y eso implica más riesgo para personas consumidoras y con ello no hay mecanismos para reducir riesgos, además del nulo apoyo a las asociaciones civiles”.
Precisó que las pruebas para medir la presencia de opioides no las tiene el sector Salud y por ende no hay forma de medirlo o prevenirlo.
Las tiras reactivas que utilizan en Verter son compradas o donadas por organismos internacionales, principalmente de Estados Unidos y Canadá. De igual forma la Naloxona, medicamento para revertir sobredosis por fentanilo e incluso ayudan a la Cruz Roja a donar dosis para salvar vidas.
DETENCIONES
La directora de Verter remarcó que no han detectado un incremento en la población consumidora, solo las variantes de sedantes, pero sí les han reportado las constantes detenciones arbitrarias de la Policía Municipal para que no ingresen a la zona conocida como Centro Histórico.
“Hay acoso policial y detenciones arbitrarias y esto los aleja del servicio de salud y reducción de daños”, dijo al recordar que son el único en su especie en todo Mexicali.
Criticó que en el 2023 hayan cerrado las clínicas de metadona por orden del gobierno federal, así como la criminalización a las personas consumidoras y también contra las personas que trabajan a favor de la reducción de daños. Y al existir una cerrazón al tema, las dependencias estatales por consecuencia callan sobre la problemática del fentanilo, como la Secretaría de Salud de Baja California.
“No lo reconocen, ni quieren hablar del tema”, acotó, sólo hay apoyo general, pero al centrarse en fotos para una política de salud sobre adicciones calla o se ausenta.
NAXOLONA, INICIATIVA ‘CONGELADA’
Otra crítica fue que en el Senado de la República llegó la iniciativa para descalificar de opioides a la Naloxona y pueda ser vendida en farmacias, tema que ha estado congelado y sin revisión.
“Que el presidente López Obrador diga que la Naloxona sólo sirve para alargar la agonía de las personas consumidoras no permite que avance la iniciativa y se mantiene como psicotrópico y no como un tema de salud”.
Actualmente el principal apoyo para dichas organizaciones son las redes nacionales e internacionales donde adquieren la Naloxona y comparó que mientras en Estados Unidos por ley todos los policías deben de portar la Naloxona, en Mexicali está prohibido.
En 2024 se requiere que regresen los recursos a las organizaciones civiles que según el gobierno federal ya fueron depuradas y se reconozca las adicciones de fentanilo para tener una política nacional de salud pública, señaló Angulo Corral.
APOYOS
Las personas interesadas en apoyar a Verter pueden donar artículos de higiene personal, para gestión menstrual, medicamentos contra el dolor que no requieran receta médica, antibióticos y material para curación.
La asociación se ubica en Azueta y Juárez, junto al museo Wok en el Centro Histórico de Mexicali y su horario de atención es de lunes a viernes de las 10:00 a las 16:00 horas.
