El año pasado en Mexicali se detectaron y clausuraron 44 predios que eran utilizados como basureros clandestinos a cielo abierto y 24 de esos casos culminaron en denuncia ante el Ministerio Público. Thelma Castañeda Custodia, titular de la Secretaría de Protección al Ambiente en el Estado, reconoció que el problema ameritó una campaña específica para detectar ese tipo de sitios en cada uno de los Municipios bajacalifornianos.
A nivel estatal en el 2018 se ubicaron 89 predios que fungían como centros ilegales de concentración de basura y por ello los propietarios recibieron multas económicas que en total arrojaron 4 millones 413 mil 080 pesos. Llama la atención que en estos sitios abundan residuos generados en los domicilios y algunos que se derivan de cuestiones comerciales e incluso médicas, aunque estos últimos no en gran volumen.
“La mayoría son residuos de uso doméstico, se han encontrado también de la construcción y electrónicos, la gente tira de manera revuelta todo y hemos encontrado aunque en menos cantidad residuos peligrosos”. Cuando un predio se identifica como tiradero clandestino, la SPA y autoridades municipales dan el lugar por clausurado e inician un proceso administrativo contra el propietario a quien además se invita a limpiar y cercar el terreno.
Cuando se rompen los sellos de clausura el caso es turnado al Ministerio Público, indicó Castañeda Custodia. Aunque hay propietarios que manifiestan no ser responsables de la basura, en otros casos se ha comprobado que los dueños abren su predio y cobran una cuota para permitir a los ciudadanos depositar su basura.
89 basureros clandestinos ubicados el año pasado en el Estado
- 44 en Mexicali
- 36 en Tijuana
- 9 en Ensenada
