El gobierno municipal realizó labores de gestión para que la empresa Promotora Ambiental S.A. de C.V. (PASA) arregle el cerco que divide al centro de transferencia de la basura, al igual que brinde mejores condiciones laborales para los pepenadores que trabajan ahí.
La alcaldesa Norma Bustamante Martínez informó que fungió como gestora para arreglar la inconformidad de los pepenadores, quienes señalaron que personas que no pertenecen a ninguna de las tres agrupaciones que laboran oficialmente ahí, les roban lo que recolectan y que ingresan de manera arbitraria al lugar.
Ayer, los pepenadores tomaron por una hora las instalaciones del centro de transferencia, ubicado en la calzada Héctor Terán Terán a unos metros de la Laguna Xochimilco, con lo cual inhibieron que ingresaran camiones recolectores de la basura, sin embargo, esto no afectó el servicio de recolección.
La presidenta municipal recordó que desde el 2010, el Ayuntamiento de Mexicali otorgó una concesión a PASA para que esta empresa preste el servicio de transportar la basura al relleno sanitario de disposición final, situado en el kilómetro 25.5 de la carretera Mexicali a San Felipe.
José Luis Ramírez, Emilio Ramírez y Ezequiel Ortiz, dirigentes de la agrupación Pepenadores Libres, de la Unión Bote y Chatarra y de los Pepenadores Unidos Reciclando por Mexicali, respectivamente, puntualizaron que se solicitó mayor seguridad y supervisión en dicho centro, debido a que les roban lo que segregan de la basura, lo cual les afecta de manera directa a las 450 familias que dependen de este trabajo.
Además, pidieron que la empresa otorgue gafetes con el fin de identificar a los que integran a estos tres sindicatos, puesto que los que les roban, se meten fácilmente debido a que el cerco del centro de transferencia está caído.
“Hay personas que ingresan y nada más vienen a hacer maldad”, expresó Ortiz.
La alcaldesa, quien acudió al centro de transferencia para dialogar con los pepenadores, refirió que aunque no le corresponde, participará en la gestión de le que solicitan, para lo cual un representante de la empresa acordó que este mes se arreglará el cerco en la parte sur del inmueble y el del oriente en marzo.
Respecto a los gafetes, se comprometieron a otorgarlos en una semana.
Bustamante Martínez admitió que al municipio le interesa cambiar el centro de transferencia a otra zona, en la carretera a San Felipe, ya que existe un proyecto impulsado por el gobierno del estado que pretende recuperar al sistema lagunar de tal manera en que se puedan realizar actividades ecológicas y recreativas en las lagunas Xochimilco, México y Campestre, que forman un complejo.
Mencionó que han encontrado dos terrenos que cumplen con las características necesarias para dejar de utilizar al centro de transferencia actual, los cuales suman una superficie de 30 mil metros cuadrados.
Para cambiar de lugar al centro de transferencia, dijo que se necesitarían alrededor de 120 millones de pesos y que se está negociando con la empresa la posibilidad de hacerlo.
“Ustedes saben que la negociación con PASA, el contrato no lo hizo este gobierno. Entonces, estamos negociando, sobre lo negociado. Para movernos, ellos tienen que estar de acuerdo, para empezar.”
La presidenta municipal puntualizó que desde el 2010 el gobierno municipal otorgó una concesión a la empresa PASA y que actualmente pagan 100 millones de pesos anuales a la empresa para prestar el servicio de trasladar la basura y darle el confinamiento final, cuyo contrato culmina hasta el 2030.