Un almacén de venta de ropa al mayoreo que funciona en plena zona residencial en el fraccionamiento Villa Bonita, a pesar de contar con sellos de suspensión de actividades, a provocando la molestia e inconformidad de vecinos que denuncian de forma anónima por temor a represalias por parte del comerciante, que presume de tener influencias.
Se trata de un negocio ubicado en la avenida Valle de los Ángeles 2010, así como en una vivienda anexa con el número 2006, que en realidad son dos casas habitación que funcionan como almacén y tienda de venta al mayoreo, que desde hace 3 años funciona en total impunidad.
El denunciante comentó que desde entonces han perdido la tranquilidad, ya que día y noche llegan camiones de empresas de paquetería que dejan los pacas de ropa en los domicilios, incluso hasta un tractocamión de la empresa Castores, entra en la vialidad que se encuentra en una zona de uso habitacional para dejar la mercancía.
Mencionó que todo empezó durante la pandemia, cuando esta persona, que se dedicaba a vender botanas fuera de las plantas maquiladoras, de repente ya no pudo trabajar, por lo que se puso a vender ropa que colgaba en su cerco, posteriormente ya tenía racas de ropa en su domicilio.
Sin embargo, le fue tan bien a este negocio, que después empezó a vender al mayoreo e incluso la persona compró la casa del vecino que también la usa de almacén y de oficina de ventas.
El movimiento de camiones y de gente es constante, incluso los clientes bloquean las salidas de las cocheras de los domicilios, a lo que la persona dueña del negocio hace oídos sordos a los reclamos de los vecinos que piden no se estacionen en sus propiedades.
Incluso han presentado la denuncia anónima ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), mediante un oficio con número 1572, dirigido a Manuel de las Fuentes Lara, Administrador Desconcentrado de Auditoría Fiscal de Baja California “1”, con fecha del 27 de octubre del 2021, ya que presumen que esta persona evade impuestos, pero a la fecha no han obtenido respuesta.
También, por esas fechas acudieron ante la Dirección de Administración Urbana (DAU), para presentar una denuncia, misma que fue atendida, y le pusieron sellos de suspensión de actividades al negocio, sin embargo, como este inmueble tiene otra entrada, sigue operando en la mayor impunidad.
La alcaldesa Norma Bustamante ha atendido el tema, sin embargo, los inspectores acuden para revisar la situación, pero los sellos siguen en su lugar, no han sido violados, sin embargo, la empresa sigue trabajando, incluso en presencia de los inspectores que en este caso no hacen nada al respecto.
Es este caso presumen que hay un acto de corrupción, ya que este negocio no puede seguir operando en una zona residencial, además que representa un serio peligro para los vecinos por la ropa ahí acumulada, que es un material altamente flamable, por lo que los Bomberos deberían tomar cartas en el asunto.