Refugio Miranda López lleva dedicándose 10 años transformando cientos de llantas que encuentra tiradas en las calles de la ciudad para convertirlas en un adorno idóneo para el hogar.
Don Cuco, como es mejor conocido, reconoció que desde pequeño siempre ha sentido un aprecio especial por la naturaleza y los animales, por lo que de adulto ha buscado la manera de hacer algo a favor del medio ambiente y con las llantas buscó hacer algo bello.
Las primeras piezas que creó fueron macetas para plantas, después perfeccionó su técnica al recrear animales, tractores, automóviles y hasta motocicletas. Para él el cielo es el límite al momento de hacer una nueva creación.
“A veces que necesitamos llanta especial, me voy a las llanteras y me traigo todos los desperdicios”.
Estos adornos para el hogar podrían durar hasta más de 50 años.
“Les vendo la idea del reciclaje y de cuidar nuestro medio ambiente y se interesan y se llevan una, dos, a veces hasta cuatro artesanías”.
Una vez que termine la contingencia, don Cuco colaborará con maestros para fomentar la cultura de reciclaje con niños cuando se regularicen las clases.
“Si no los cuidamos, va a llegar el momento en que se van a acabar (los recursos naturales), entonces tenemos que hacer algo y empezar desde abajo”.