Tijuana.- La población latina ha sido duramente golpeada por la pandemia de coronavirus en el condado de San Diego, pues es la raza étnica que registra el mayor número de muertes, de contagios e ingresos en los hospitales por coronavirus, según los Servicios de Salud Pública de ese condado.
Las estadísticas muestran que desde el 14 de febrero que inició la pandemia, al 13 de agosto, los latinos representaron casi la mitad de las 615 muertes dentro de las 18 ciudades que componen el condado de San Diego. Fueron 277 (45%), seguidos por la raza blanca con 235 muertes (38%), y los asiáticos con 64 (10%).
Según el mismo reporte de salud sandieguino, de los 33 mil 659 pacientes que fueron positivos al coronavirus, 17 mil 47 fueron latinos que enfermaron (62%).
Esas cifras al parecer se deben a las condiciones de pobreza en las que vive la comunidad latina en el estado más rico de Estados Unidos, estimó Bárbara Jiménez, directora de las Operaciones Regionales del condado de San Diego.
“Desafortunadamente estamos viendo que la enfermedad del Covid-19 ha tenido un impacto más severo en la comunidad latina, especialmente en la región sur del condado. Los latinos o hispanos representan aproximadamente el 34% de la población del todo el condado de San Diego”, dijo Bárbara Jiménez.
El sector salud de California también tiene registro de que esta comunidad presenta comorbilidades.
Los latinos padecen mayormente enfermedades como diabetes, hipertensión arterial y obesidad derivado de una alimentación no balanceada y sedentarismo.
“Muchos latinos hemos visto que tienen esta dificultad -de salud- antes de que empezara la pandemia”, comentó la directora de las Operaciones Regionales.
En todo esto coinciden distintas autoridades del sector salud, son factores que aumentan el riesgo de complicaciones por el virus que ha llevado a más de mil 682 latinos a un hospital.
Otro de los factores es que la población latina está mayormente empleada en el área de la construcción, restaurantes de comida rápida, tiendas de supermercados, áreas de limpieza y mantenimiento, entre otras actividades que no pararon.
Son servicios considerados esenciales, así que la mayoría no pudo tener resguardo domiciliario, comentó Jason Wells, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de San Ysidro.
“En San Ysidro, desgraciadamente, el rango económico de la mayoría de los residentes de San Ysidro es bajo, te estoy hablando de los residentes. Muchos son trabajadores esenciales, expuestos más al virus, y entonces la cifra -de contagios- es un poco alta”, dijo.
La rápida propagación del coronavirus entre esta población, suponen los servicios de salud, obedece también a que son comunidades que viven hacinadas.
Las 18 ciudades que lo componen tienen los costos de renta más altos de la Unión Americana, y como la mayoría de los latinos tienen bajos salarios, esto orilla a las familias a compartir viviendas para dividir los gastos de alquiler, según estudios realizados por la organización Centro de Iniciativas Políticas (Center on Policy Initiatives, por sus siglas en inglés -CPI-).
De acuerdo con datos de la Alianza de Californianos por una Comunidad Empoderada (Alliance of Californians for Community Empowerment, por sus siglas -ACEE-), la renta promedio de un apartamento de dos recámaras en San Diego es de dos mil 290 dólares, solo superados por las ciudades de Los Ángeles (tres mil 200) y San Francisco, cuatro mil 560.
Tras los múltiples factores que hacen a los latinos más vulnerables en la pandemia, el sector salud del condado de San Diego activó planes emergentes para atender a esta comunidad.
Incluye la renta de cuartos de hotel para hospedar a quienes no tengan un lugar para el resguardo domiciliario y también ofrece comida y lavado de ropa para evitar contagios entre las familias.
Con el programa “Promotoras”, líderes comunitarios que hablan español tienen acercamiento con pacientes que dieron positivo al virus tras examen PCR de laboratorio para acercar los programas de salud y otros apoyos.
“Es confidencial, nunca les vamos a pedir el número de seguro social, no les vamos a pedir los estatus migratorios de ellos, ni de quienes viven en su casa. La razón y lo importante de contestar la llamada y dar la información, es que no se siga propagando la enfermedad”, destacó Bárbara Jiménez, la directora de las Operaciones Regionales del condado de San Diego.
Otro punto de atención especial es la garita de San Ysidro, por donde diariamente cruzan miles personas.
Y tras las restricciones del cruce internacional que solo permite el paso a mexicoamericanos con residencia legal y a ciudadanos estadunidenses, se determinó la instalación de puntos de pruebas de detección de Covid-19 en ese cruce del lado americano.
“Esto es un trabajo ajeno al CBP (Protección Fronteriza y Aduanas), son enfermeras del condado de San Diego y está a un lado de la línea, pero es diferente”, detalló Bárbara Jiménez.
Las pruebas son gratuitas, sin previa cita y en un lapso de tres días se entregan los resultados. Son voluntarias y no se revisa el estatus legal o nombre de la persona, únicamente se pide que dejen un número telefónico para llamarles y entregar los resultados de laboratorio, así como para ofrecer los programas de salud médica.
A la fecha se han detectado 162 pacientes positivos que cruzaron la frontera de San Diego hacia Tijuana por la garita peatonal de San Ysidro, de acuerdo con la información compartida con autoridades sanitarias del condado de San Diego, explicó el médico Joaquín Eduardo Zúñiga Yee, coordinador de Vigilancia Epidemiológica de la Jurisdicción Sanitaria #2 en Tijuana.
“Son pacientes que dieron positivos a la prueba de PCR, ellos lo valoran hasta que lo confirman y están hospitalizados. Nos informan a nosotros para que hagamos nuestras acciones”, comentó.
Mientras tanto, del lado mexicano, hay un filtro sanitario que fue colocado en la garita de San Ysidro desde que inició la pandemia de coronavirus a finales del mes de marzo, según la versión de las autoridades.
El filtro sanitario, afirman, opera las 24 horas del día con un médico y una enfermera por turno: matutino, vespertino y nocturno.
En ese punto sanitario se toma la temperatura corporal de los fronterizos, responden un cuestionario y en caso de presentar síntomas, se les pide que acudan a un médico, que en su mayoría acuden a un médico en Estados Unidos, pues son personas residentes legales o ciudadanos americanos.
“La intención es que estos filtros funcionen, y que todas las personas que están regresando de sus labores, pues cerciorarnos que no lleguen enfermas. Se les hace un cuestionario breve de cinco preguntitas. Una es si en las últimas 24 horas ha tenido fiebre, si ha estado con casos confirmados”, explicó Joaquín Eduardo Zúñiga Yee.
Hasta el momento no se ha registrado un caso extremo de paciente con deteriorado estado de salud, de acuerdo con la Jurisdicción Sanitaria de Tijuana.
Detalló que el protocolo sanitario es: al observar a una persona enferma, esta será retenida y se dará aviso a los servicios de emergencia para que la trasladen a un Hospital Covid, que puede ser el Hospital General de Tijuana o una clínica del IMSS, según sea el caso.
ESTADÍSTICAS EN AMBOS LADOS DE LA FRONTERA
Del lado mexicano, la pandemia del coronavirus ha dejado del 7 de marzo al 12 de agosto en Baja California dos mil 869 muertes y 14 mil 966 personas han dado positivo. Se ha hecho las pruebas PCR al 10% de los pacientes que presentan síntomas y llegaron a hospitales públicos.
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