Aunque dos jueces en el país han informado a la Cámara de Diputados que el pleno no debe discutir el dictamen de la Reforma al Poder Judicial Federal (PJF), continuará el paro de trabajadores, jueces y magistrados.
Más aun cuando el diputado Ricardo Monreal Ávila, ha dicho que Morena, no tiene que hacer caso de las resoluciones de los jueces y la reforma sigue adelante, informó el juez de Distrito, especializado en el Sistema Penal Acusatorio del PJF, Óscar Molina Zavala.
Explicó que lo que han determinado los jueces, es suspender la discusión del dictamen referente a la reforma del PJF en sesión plenaria.
“Se ordena que no se discuta, que no se lleve a cabo esa sesión de los diputados, para discutir el decreto de reformas, hasta en tanto el juez de Distrito que concedió esa suspensión, determine si ese proceder resulta correcto, entonces es una medida cautelar”.
Molina Zavala comentó que es una forma de retrasar este proceso legislativo, obviamente no les va a gustar a los integrantes del Grupo Parlamentario de Morena, pero es una determinación apoyada, respaldada de manera jurídica.
El problema es que el coordinador de los diputados federales de Morena, Ricardo Monreal, ya dijo que no tienen por qué hacer caso de la determinación de los jueces.
Si Monreal que es un doctorado en derecho, que siempre ha enseñado a sus alumnos que se deben respetar las decisiones en materia de amparo, y ahora él dice lo contrario, entonces ¿qué mensaje está enviando?
El nivel de conflicto está escalando de nivel, ya que es el PJF contra el Poder Ejecutivo y el Legislativo, en el ámbito de sus respectivas atribuciones, para ver quien puede más.
Lo más probable es que el Congreso de la Unión, o el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, denuncien a los jueces que otorgaron la suspensión, obviamente van a argumentar que se excedieron y que no tienen las atribuciones para paralizar un proceso legislativo, y que invaden esferas de competencia.
Luego se tendrá que hacer una investigación para determinar si los juzgasdores en cuestión actuaron de manera absurda, negligente, aunque esto también son patadas de ahogado del presidente y de los diputados.
Pero lo que hay que observar es que bien o mal, hay una decisión de un juez, y tanto el presidente como el Congreso de la Unión cuentan con un recurso de queja contra esta suspensión, que lo conoce un tribunal colegiado de Circuito.
En dado caso, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) cuenta con la facultad de atracción, es decir, atraerlo y resolver este recurso de queja en contra de la suspensión decretada por los jueces de distrito.
Si el tribunal colegiado o la SCJN decreta que la queja contra la suspensión no se encuentra fundada y la desecha, entonces tiene que cumplirse, y aquí habrá que ver si el Ejecutivo y el Legislativo cumple con esto.
La Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) ya está observando este caso, ya que algunos magistrados fueron a Washington para pedirle que hiciera algunas recomendaciones al estado mexicano para garantizar la independencia judicial, es decir, se le pidió su intervención como un observador.
Entonces, se supone que esta reforma al PJF es para acabar con la corrupción, sin embargo, para combatirla se deben respetar las decisiones, o bien impugnarla por medio de instancias legales, y no posicionarse con actitudes de no hacer caso.
Sin embargo, y tal vez pierdan esta batalla y los jueces se vayan, lo que ve muy importante es que este movimiento que empezó con algunas entrevistas y que ido agarrando un poco más de fuerza, ha generado contagio con los ciudadanos que miraba esto de lejos.
Incluso la propia gente cooptada por Morena, a la que le dan cada mes su dinero, se está dando cuenta de alguna manera que va a resultar afectada, señaló.