La población centroamericana que ha llegado a Mexicali en la denominada caravana migrante sigue buscando la forma de trasladarse a Tijuana, pues consideran que allá estarán aún más cerca de hacer realidad el sueño americano.
Elena, una mujer que llegó a Baja California con sus dos hijos de 4 y 6 años, desconoce el momento en que se presentará con las autoridades estadounidenses para pedir el asilo humanitario, pero lo que quiere es llegar a Tijuana y encontrarse con el resto de sus compatriotas.
Nos dicen que Tijuana es el sitio para reunirnos, hemos caminado tanto y ya llegamos hasta aquí que no podemos rendirnos ahora, dijo la mujer de 35 años.
Hasta la mañana de ayer los más de 700 migrantes alojados en el albergue “Castillo Amarillo” de la colonia Compuertas buscaban la forma de trasladarse a Tijuana y aunque no descartan la posibilidad de caminar, tienen en cuenta que uno de sus paisanos murió atropellado en la carretera.
Mejor esperar
Yo traigo a mis hijos y a mi esposa, no voy a arriesgarlos a que sean muertos en el camino, vamos a esperar hasta que sea seguro, nadie puede arriesgarse ya.
Julián, padre de familia procedente de Honduras.
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La mañana de ayer decenas de migrantes se vieron caminando más de 15 kilómetros desde Compuertas hasta la zona centro, donde esperaban ver con más claridad las posibilidades que tenían.
Mientras caminaban junto al cerco que divide a Mexicali y Calexico por la avenida Colón, elementos de la Patrulla Fronteriza los observaban desde el lado americano, al igual que un helicóptero que durante horas sobrevoló sobre ellos aunque en los límites estadounidenses.
Las últimas cifras indican que a Baja California han llegado más de 7 mil 500 centroamericanos integrantes de la caravana y no se descarta que otros grupos arriben en los días siguientes.
