La falta de respuesta ante la exigencia del pago de sus finiquitos motiva a trabajadores jubilados del magisterio a iniciar una huelga de hambre y un plantón afuera del edificio del Poder Ejecutivo.
En noviembre del 2019 el gobernador, Jaime Bonilla Valdez se comprometió con ellos a apegarse a un plan escalonado de pagos, promesa que aparentemente quedó olvidada por parte del mandatario.
La protesta de los trabajadores de la educación comenzó desde la semana pasada y fue hasta la tarde del lunes que una comitiva de representantes del Gobierno del Estado los atendió para recoger sus inconformidades pero no llegaron a ningún acuerdo.
Guadalupe Sánchez Nevares, maestra jubilada, hizo responsable al Gobernador del Estado y a la dirigente de la sección 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), María Luisa Gutiérrez Santoyo, quien asegura no ha apoyado a los jubilados en su lucha por cobrar los finiquitos que por ley les corresponden.
“Somos el único gremio que espera meses o años para que se les pague, el gobernador fue empático y aseguró que si llegaba al gobierno no íbamos a batallar”.
La molestia de los jubilados contra Bonilla aumentó al escucharlo decir que el movimiento tiene orígenes políticos y que incluso Jorge Hank Rhon está motivando la protesta de los jubilados.
Sánchez Nevares aseguró que ni siquiera conoce al ahora precandidato a la gubernatura y consideró ofensivos los señalamientos de Bonilla Valdez.
“Nos ofende y nos duele, al gobernador le explicamos la problemática del magisterio, esto no es político pero de esa forma evade su responsabilidad”.
La huelga de hambre se mantendrá hasta obtener respuesta de las autoridades estatales, indicaron los trabajadores jubilados de la educación.