Con el decreto 350 que recientemente emitió el gobierno del estado, las cervecerías de degustación bajacalifornianas también podrán ofrecer a la venta vino producidos en la entidad e incluso destilados, informó el presidente de la asociación de Microcerveceros de Mexicali, Oscar Galindo Singh.
Esta nueva determinación que fue aprobada por los diputados de la legislatura estatal anterior, se aprobó la reforma a los artículos 6, 8 y 10 último párrafo de la ley para la venta, almacenaje y consumo público de bebidas alcohólicas del Estado de Baja California, con el cual se garantiza el otorgamiento de permisos a precio preferencial para productores de cerveza y vino artesanal.
Este decreto beneficia directamente a las productoras de vino locales y a las microcerveceras artesanales, toda vez que se complementan entre sí, afirmó Galindo Singh
“Es un ganar-ganar. Es una oferta artesanal de aquel lado y la estamos combinando ahora con la cerveza y pues ya enriquece un poquito lo que le podemos ofrecer a los clientes, siempre hay que de un grupito de 10 o 12, a lo mejor hay un par que no toman cerveza, si ya ofreces vino y casi todos ofrecemos alimentos, pues ya ofrecemos una experiencia de degustación de ambas”.
El empresario apuntó que los permisos seguirían costando lo mismo, solamente ahora se expande la cobertura que les permitiría vender vinos y destilados.
“También incluye la venta de destilados como subproducto de la cerveza, podemos destilarla para hacer licores, también vamos a poder aceptar los destilados que se generen en las cervecerías”.
Comentó que se le informó a la asociación de microcerveceros que los municipios tienen 60 días para incorporar esa nueva determinación a los reglamentos de alcoholes de cada localidad.
“Los legisladores (salientes) se convencieron que hay que apoyar a la micro pequeña industria, las mipymes somos las que estamos manteniendo el país; el 80% de la economía se genera alrededor de las mipymes”.
El también dueño de la marca de cerveza artesanal Puerco Salvaje, recalcó que con este decreto, la economía se queda en la ciudad y en el estado a diferencia de las grandes empresas trasnacionales extranjeras, cuya ganancia no se queda en el país.