La comisionada mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) Adriana Reséndez Maldonado, advirtió a la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, que dada la situación de sequía que persiste en el Río Colorado, debe implementar acciones de ahorro de agua.
Debido a la sequía más extensa en los últimos 100 años, que data desde el año de 1999, han disminuido los niveles de las presas Mead y Powell que contienen las aguas del Río Colorado, por lo que está afluente es considerada la más amenazada de Estados Unidos.
Lo anterior ha provocado que por primera vez en la historia del tratado de aguas internacionales que data de 1944, se aplique el primer recorte a la cuota que se le entrega a México, así como un segundo nivel de ahorros, con lo que suman 99 millones de metros cúbicos para 2022, y de seguro así, este recorte será mayor para el 2023.
En el contexto anterior, la Comisionada mexicana sostuvo una reunión el pasado 3 de mayo con la Gobernadora del Estado de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, a quien se le presentó el estado actual de las condiciones de la cuenca del Río Colorado, enfatizando la necesidad de que México desarrolle proyectos que generen ahorros de agua y que contribuyan al mantenimiento de los niveles en las presas de la cuenca, en beneficio de todos los usuarios de la misma.
La CILA comunica que ha mantenido un seguimiento puntual de la evolución de las condiciones que prevalecen en la cuenca del Río Colorado. En ese sentido se sostuvo una reunión con la contraparte estadounidense el pasado 27 de abril, en la cual se revisaron los pronósticos de elevación y almacenamiento de las principales presas del sistema, principalmente la Presa Glen Canyon (Lake Powell) y Presa Hoover (Lago Mead).
En dicha reunión, la parte estadounidense nos informó de las acciones extraordinarias que están emprendiendo con la meta de mantener los niveles en el Lago Powell. Estas acciones beneficiarán a los usuarios en ambos países.
La Sección mexicana de la CILA continuará celebrando reuniones con la frecuencia que sea necesaria con su contraparte estadounidense, a fin de dar seguimiento a la evolución de las condiciones del sistema, y con ello estar en posibilidad de informar con la oportunidad necesaria a las autoridades y usuarios en México de la evolución de los almacenamientos de las presas del sistema, y en su caso, la necesidad de adoptar medidas adicionales que se hagan necesarias para la protección del mismo.