El cierre de la frontera ha empujado la inflación en alimentos al menos en Mexicali y Tijuana, ya que los comercios locales dedicados a la venta de comida han incrementado sus precios, en algunos casos hasta en un 30 % ante la falta de alternativas de los consumidores de cruzar al otro lado de la frontera.
Por lo anterior, resulta más sano para los consumidores que se abra la frontera para desahogar la presión inflacionaria, sobre todo los importados, y puedan adquirir los alimentos en los comercios de Estados Unidos, señaló el economista, Enrique Rovirosa Miramontes.
El también ex presidente del Colegio de Economistas de Mexicali, explicó que la inflación se debe principalmente a 4 factores, siendo estos: el efecto retardado del aumento de salario mínimo en la frontera; ajustes Tipo de cambio; confinamiento y el cierre de frontera.
El confinamiento se ha traducido en mayor gasto en consumo de electricidad, agua y gas doméstico, asimismo, a mayor consumo de productos alimenticios como resultado del stress de estar en casa, expuso el maestro en economía.
El tipo de cambio también ha ejercido un impacto sobre los precios tanto de productos importados como de insumos necesarios para su procesamiento, factor que finalmente incide en los costos de producción y por ende de los precios finales.
En enero y febrero de este año la cotización promedio mensual fix del dólar fue de 18.80. A partir de marzo, se elevó a más de 22 pesos por dólar, teniendo el comportamiento siguiente: marzo 22.38; abril 24.27; mayo 22.42; junio 22.30; julio 22.40; agosto 22.21 y septiembre 21.68.
En este contexto, al mes de septiembre, la inflación general anualizada en Mexicali ascendió a 3.8 % mientras que en Tijuana fue de 4.8 %, ambas cifras por arriba de la meta de Banxico de 3 %, +/- 1 punto porcentual.
En el caso del rubro de alimentos, el aumento de precios ha sido mucho mayor: Tanto en Mexicali como en Tijuana alcanzó 8.1% de septiembre de 2019 a septiembre de este año.
Hay que destacar que el confinamiento empezó en marzo, siendo que la inflación que se acumuló en alimentos en el periodo abril a septiembre de este año fue de 3.1 % para Tijuana y 2.3 % para Mexicali.
Rovirosa Miramontes señaló que el cierre de la frontera ha contribuido a este comportamiento de los precios, pues se dio un fuerte impulso a la demanda local como consecuencia del traslado de compras que antes se hacían del otro lado de la frontera a los comercios de nuestras ciudades.
Con ello, se cerró una llave que obligaba a los comercios locales a ser cuidadosos y más competitivos.
En estas condiciones, el cierre de la frontera no sólo vino a afectar a quienes suelen realizar compras al otro lado, sino también a quienes no lo hacen, vía el disparo que se ha dado tanto en artículos nacionales como importados, aseveró el economista.