Con casi 32 mil casos confirmados de Covid-19 desde marzo, Baja California cerrará la última semana del año en color rojo del Semáforo de Vigilancia Epidemiológico, de acuerdo con la Secretaría de Salud estatal.
Las autoridades de Salubridad manifestaron que en los más recientes días, las estadísticas mostraban una tendencia hacia la estabilidad de la curva de casos de Covid-19, los indicadores aún no permiten que Baja California, regrese al color naranja del Semáforo de Vigilancia Epidemiológico.
Y es que la entidad tiene un índice de transmisibilidad mayor al 1.24, principalmente en Mexicali, que concentra la mayor cantidad de contagios, activos y acumulados, siendo así el foco rojo de la entidad.
De igual manera, la ocupación hospitalaria se encuentra por arriba del 87% según la Secretaría de Salud, el cual es uno de los indicadores más relevantes en el combate y atención de la pandemia por el virus.
HGT NO RECIBE PACIENTES
Decenas de personas en Tijuana manifestaron en redes sociales su angustia al no ser atendidos en el Hospital General de Tijuana debido a que el personal reportó el nosocomio lleno este fin de semana, por lo que se vieron imposibilitados para recibir más pacientes.
El Hospital General de Tijuana, en conjunto con el Hospital General Regional 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social son las unidades más grandes destinadas para la atención de los pacientes con Covid-19, sobre todo los que han desarrollado la enfermedad grave.
RELAJAN MEDIDAS
Pese a que el semáforo se encuentra en rojo, las medidas sanitarias se relajaron en Playas de Rosarito ese fin de semana.
En el Centro Comercial Pabellón Rosarito, al menos cuatro establecimientos cuyo giro principal es la venta de bebidas alcohólicas, se encuentran abiertos bajo el argumento que tienen venta de alimentos y una feria de juegos mecánicos, ubicada en un predio frente a dicho centro comercial se encuentra abierta pese a que autoridades sanitarias suspendieron esta actividad desde el 21 de diciembre, cuando se declaró alerta máxima.
Respecto a los mercados sobrerruedas, sobre la calle Vicente Cordero de la colonia Lucio Blanco, cientos de vendedores ambulantes instalaron sus puestos esperando recuperarse de la crisis económica que ha dejado la pandemia.
El señor Manuel Martínez, un vendedor ambulante de verduras y frutas del mercado sobrerruedas “Margarita Maza de Juárez”, externó que siguen los protocolos para no ser cerrados como lavado de manos, gel antibacterial y uso obligatorio de cubrebocas y sobre todo mantener sana distancia en los espacios.
El señor Pedro Cisneros dice que sabe de la propagación del coronavirus, pero acude a estos mercados porque los precios son competitivos y los alimentos y productos están por debajo de los precios en cadenas de supermercados.