Cattleya, es una flor distintiva de Honduras y es también el nombre que lleva la primera bebé méxico-hondureña nacida en medio de la caravana migrante que ha llegado a la frontera norte.
La niña que nació en el Hospital Materno Infantil de Mexicali (HMI) el pasado 28 de noviembre a las 04:28 horas pesando 2 kilos 890 gramos, viajó más de 4 mil 200 kilómetros en el vientre de su madre Paulina y en compañía de su padre Juan Carlos y su hermano menor.
Embarazada, la joven madre vivió los momentos de tensión en el ingreso a México donde hubo incluso gases lacrimógenos lanzados por las autoridades mexicanas.
Una vez en suelo mexicano, la familia inició la travesía rumbo a la frontera norte, algunos trayectos caminando y otros en camión.
Las últimas 20 horas de camino las pasaron en un autobús que los dejó en el Hotel del Migrante, en la zona centro de Mexicali y siete horas después Paulina comenzó con los dolores de parto y en taxi se dirigieron hasta el HMI.
“Gracias a Dios teníamos todavía trecientos pesos ahí y el taxi que nos llevó nos cobró doscientos cincuenta hasta allá, entró a las dos de la mañana y ella nació a las cuatro veintiocho completamente sana”.
La bebé se encuentra alojada con sus padres en el albergue La Posada del Migrante y quienes deseen pueden donarle pañales, ropa u otros artículos que serán bien recibidos.
La familia hondureña piensa establecerse en Mexicali luego de regularizar su situación migratoria.