Para Carlos Adrián Cervantes Nava es una gran responsabilidad representar a Jesucristo en el Vía Crucis que representará mañana la Parroquia San Juan de Los Lagos, en la colonia Alamitos.

Él es residente del fraccionamiento Valle del Pedregal, en la parte más al Oriente de la ciudad y pese a estar adscrito a la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, por azares del destino le tocó colaborar en la de San Juan de los Lagos, lo cual se toma con mucha seriedad, ya que ha procurado ser un ejemplo para su comunidad, sobre todo durante la cuaresma. Al principio en la iglesia le habían pedido que colaborara en el Vía Crucis, pero al ser estudiante de Enfermería de la Universidad Autónoma de Baja California reconoció que se le iba complicar con los compromisos académicos, sin embargo hace un mes el padre Alfonso Guerra le pidió en apoyo interpretar al hijo de Dios, por lo que decidió aceptar.

Estas circunstancias lo hicieron darse cuenta que debería de cumplir la solicitud del párroco, lo cual es similar a la responsabilidad que decidió tomar Cristo al sacrificarse por la humanidad. “He pasado por unas cosas fuertes, tenía ciertos problemas y dudas, me cayó como una flecha directita al corazón, a lo mejor era un mensaje de Dios para interpretar a su hijo”. Carlos Adrián ha participado en varios Vía Crucis desde el 2013, pero nunca ha interpretado a Jesús, por lo que en este tiempo en el que ha entrado en ese personaje, ha sido riguroso consigo mismo siguiendo el ejemplo del hijo de Dios, manteniéndose en gracia, tal y como lo hizo Cristo al irse al desierto, quien después de ser tentado por el mal durante cuarenta días, no claudicó.

“El diablo lo quiso tentar y él se negó cada una de las veces”. Representar al hijo de Dios no es fácil, toda vez que al haber cometido un error en un problema personal que está atravesando actualmente, se sentía indigno de representar a Jesús, pero recordó que las personas suelen errar, lo cual es humano. “Al ser líder de mi comunidad, pensé ‘¿cómo les voy a hablar a los muchachos si yo les fallé tanto a ellos?’, pero como somos humanos, tendemos al fallo y esto para mí fue como una señal de que el tiempo de cuaresma es tiempo de cambiar”. La parte más difícil del Vía Crucis, consideró Carlos, es durante la cuarta estación en la que está frente a su madre y la tercera caída, en la novena estación. A quien le toque actuar como Jesús en el Vía Crucis, le recomendó prepararse bien emocionalmente, siendo que se trata de escenas trágicas. “Recomendaría que empiecen a leer las citas de la Biblia y vean películas del tema”.