Asociaciones animalistas junto con el diputado Juan Diego Echevarría Ibarra buscan retirar la categorización que se le dio a ciertas razas de perros en la Ley de Protección de los Animales Domésticos del Estado de Baja California como potencialmente peligrosos.
El legislador explicó que dicha propuesta será revisada al interior de la comisión de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable que preside en el Congreso local, ya que cualquier perro, sin importar su raza, puede llegar a morder si se siente acorralado o bajo alguna situación que le genere estrés o ansiedad.
De acuerdo al artículo 62 de la mencionada ley, se consideran ejemplares caninos potencialmente peligrosos a las razas american staffordshire terrier, los bullmastiff, doberman, pitbull terrier, american pitbull terrier, los rottweiler y los stafforshire terrier, así como a sus cruzas o híbridos.
“Pero estos nos van a ser peligrosos si los crían bien, los atienden bien, los domestican, una raza no te identifica como peligroso o no”, explicó el diputado.
Echevarría mencionó que esto es parte de su agenda legislativa, en la cual además pretende hacer una modificación a la ley en la que se reconozca a los animales como seres sintientes, ya que al estos experimentan dolor y ansiedad.
Otras entidades de México han reconocido a los animales como seres sintientes ante la ley como lo ha sido Nuevo León, Guanajuato y la Ciudad de México, lo cual espera que se replique en Baja California, manifestó el diputado.
Por su parte, Patricia Torres Galaz, directora de la Asociación Civil Gente por los Animales, explicó que desde el 2011 la agrupación manifestó su rechazo ante la categorización de dichas razas como peligrosas ante la ley, argumentando que no es adecuado estigmatizarlas.
“Desafortunadamente en aquel momento se aprobaron, hoy está la oportunidad de reconfigurar esta manera en como están previstas en la ley de protección de los animales domésticos”.
También buscan modificar el Código penal
En el mismo sentido, Echevarría informó que se pretende modificar el código penal donde se establece una excepción respecto a la mutilación de animales sin fines médicos, ya que se busca facilitar la identificación de animales mediante una muesca que se les aplica en una de sus orejas.
Esto se debe a que la muesca permite conocer de manera evidente que el animal fue previamente esterilizado.
Lo que se busca, abundó, es excluir del delito de crueldad o maltrato animal a los que se involucren en dicho procedimiento que busca identificar y fomentar la esterilización.
“A nivel mundial existe una tipo señal o rasgo distintivo, donde le hacen una laceración a los animales que son esterilizados y para evitar algún tipo de controversia y problema jurídico por parte de algún médico veterinario que practica ese tipo de actividades, pues (buscamos) que no se le vaya a denunciar de manera penal”.
La directora de Gente por los Animales explicó que esta práctica sobre todo se aplica en gatos, lo cual tiene la finalidad de identificar a los animales que viven en las calles y que fueron parte de la estrategia de capturar, esterilizar y regresar a su hábitat, ya que esos animales no son adoptables, toda vez que por ser asilvestrados o ferales, les generaría un mayor estrés obligarlos a vivir al interior de un hogar, al no estar acostumbrados a ello.
“En otros países es muy utilizada esta técnica de captura, esteriliza y regresa de tal manera en que estos gatos ya no se reproduzcan, pero estos mismos gatos que permanecen en esas colonias controladas porque ya no van a estar teniendo camadas, evitan que lleguen otros gatos a los mismos fraccionamientos que sabemos, es un problema muy común en Mexicali; obviamente la idea es que este ejercicio se tiene que hacer de manera prácticamente masiva para que podamos llegar a controlar este tipo de poblaciones”.