La crisis de salud generada por el Covid-19 ha causado la disminución en los ingresos municipales, por lo que el presupuesto de egresos del XXIII ayuntamiento se encuentra congelado, utilizando solo los rubros de tareas esenciales.
El tesorero municipal, Víctor Daniel Amador Barragán, mencionó que al inicio de este 2020 la recaudación municipal inició favorablemente, sin embargo al iniciar la contingencia por coronavirus, en la que como medida de prevención se recortaron horarios de atención y cierre de algunas oficinas no esenciales, se empezó a ver la baja de ingresos en las arcas municipales.
“Cuando empezó la contingencia nosotros traíamos una recaudación muy estable con el impuesto predial y pago de derechos, después que se dieron las medidas de cambios de horarios y el cierre parcial de algunas funciones, sí se ha dado una disminución de los ingresos”.
En un comparativo con marzo del 2019, al cierre del mes se recaudó 39 millones, lo que en el mismo mes, pero de este 2020, se colectó solo 20 millones de pesos. De abril, todavía no se cuenta con cifras.
Amador Barragán indicó que desde el 17 de abril, la presidenta municipal, Marina del Pilar Ávila Olmeda, estableció una declaratoria de emergencia, en donde prácticamente se congeló todo el presupuesto de egresos, trabajando únicamente con el presupuesto destinado para actividades esenciales.
Servicios Públicos, Policía Municipal, Bomberos, Registro Civil, Jueces Calificadores, Tesorería, entre otras, son los rubros en los que se está aplicando el presupuesto durante la contingencia.
“El planteamiento es que de aquí a junio se congela todo para ver exactamente cuál va a ser el impacto económico que vamos a tener, si el déficit prevalece vamos a continuar congelando estas partidas de egreso y únicamente se van a atender aquellas que sean estrictamente indispensables”.