Cuatro jóvenes egresados de la Facultad de Deportes de la UABC emprendieron una sesión de clases de natación para jóvenes con el espectro autista en Mexicali, con el objetivo de enseñarles no solo a nadar, si no a controlar sus emociones a través del agua.
Francisco Madrigal, joven co-fundador de “Autiswim”, como les llaman a sus clases, señaló que estas lecciones funcionan como una forma de escape del estrés que los niños con el espectro sufren.
“La clase más que nada es para prevenir accidentes, también como disciplina del deporte y para mejorar sus habilidades motrices, también es una gran herramienta para reducir sus niveles de estrés y ansiedad”
La clase llevan impartiéndose alrededor de cuatro años y con capacidad de 5 a 10 niños desde los 14 hasta los 12 años, pero Francisco señala que no hay una edad límite de admisión, ellos imparten a quien desee.
“Nosotros lo platicamos saliendo de la universidad, quisimos formar un tipo de escuela de natación y al ver que en muchas partes se les negaba la entrada a los niños con necesidades especiales pues decidimos empezar las clases. ”
La recepción de la clase ha sido muy positiva, algunas madres de familia señalan que sus hijos con autismo han manifestado avances en sus habilidades de comunicación y concentración.
“Ha mejorado en su atención y su relajación, es el mejor deporte para el. Yo siento que la natación le ha beneficiado más que otros tratamientos, es un premio para el venir a nadar” Comentó Eva María Quirazco González, madre de Gabriel, uno de los primeros alumnos de “Autiswim”.
Las clases se imparten en la piscina del club Bancali durante 50 minutos de lunes a jueves en diferentes horarios, cada verano.
