La rapiña, una modalidad de robo que se da en las carreteras cuando camiones de carga sufren algún accidente, se encuentra a la alza en Baja California, particularmente en La Rumorosa, informó Luciano Jiménez Laveaga.
El delegado de la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) en la entidad destacó que cuando un camión se accidenta de repente llega mucha gente, “antes no sucedía esto, particularmente lo hemos notado en la zona de La Rumorosa”.
Indicó que los productos o artículos que más suelen ser sustraídos de los camiones transportistas son alimentos como carnes, verduras o incluso se han robado baterías para vehículo y refacciones.
“Lo verdaderamente sospechoso aquí es la rapidez con la que se coordina la gente para hacer estos robos, lo que más extraña es que esto no estaba pasando antes, suele ser gente del poblado de La Rumorosa que se dedica a merodear en las carreteras con dollis”.
Cuando pasa este tipo de situaciones, puntualizó, los transportistas de carga son los responsables de la mercancía mientras esté en su posesión, a lo cual las cargas no van aseguradas por ellos, sino por la empresa que los contrata.
FALTA DE VIGILANCIA EN LA RUMOROSA
El delegado de la Canacar señaló que ante la falta de vigilancia de la Policía Municipal o Fiscalía General del Estado hacen evidente la falta de presencia de la autoridad, lo que facilita una mayor incidencia en modos de operación de robos rapiña, así como otras actividades ilícitas.
“En lo que va del año, se han reportado más de 15 pérdidas totales de mercancía en accidentes donde hace 3 años no teníamos ningún tipo de incidencia de rapiña y es un tema que está bastante acentuado en la zona de La Rumorosa y también en la parte del desierto, como Caborca y Sonoyta”, manifestó.
Este tipo de productos, agregó, se comercializan después de manera informal, como en el caso del accidente del robo de las baterías por un accidente de un camión de transporte donde se empiezan a comercializar baterías en el mercado negro afectando al fabricante real del mercado formal.
Por otra parte, el problema con la impunidad en este tipo de hechos es que con el tiempo dejan de ser accidentes por fenómenos naturales o imprudencia del operador del camión, sino que empiezan a ser provocados.
“En Sonoyta a una empresa de Mexicali, la sacaron para robarles, llega a ser tanto la impunidad que ya no son accidentes que suceden, sino accidentes que provocan”.
COSTOS A LARGO PLAZO
Jiménez Laveaga indicó que cuando son robadas las mercancías aun estando aseguradas el costo lo absorbe finalmente el dueño de la mercancía, el dueño del transporte o la misma compañía de seguros.
“Lo que pasa cuando el monto lo absorbe una compañía de seguros es que el año que entra esa póliza es más cara, o sea, hay un efecto que termina por afectar al consumidor final y todo esto porque no hay una sanción respecto a la investigación de a dónde se fueron todas estas mercancías”, externó.
Finalmente sostuvo que de haber más vigilancia en el tramo de La Rumorosa y en zonas remotas de las autopistas se pudieran tener acciones de flagrancia. “Si hay repetición de un acto es porque hay una banda, pero no me consta, es por eso que hace falta vigilancia tanto de la Policía Municipal, Fiscalía, Fuerza Estatal y Guardia Nacional”.
ADMITEN TRAILEROS ASALTOS
LA VOZ DE LA FRONTERA realizó un sondeo con traileros que llegaron de pasada a Mexicali, en donde solo dos de ellos comentaron que sí han sufrido asaltos en carretera, pero no en Baja California, destacando como carreteras peligrosas las de Puebla, Veracruz y San Luis Potosí.
Uno de los entrevistados proveniente de Los Mochis, Sinaloa, tiene 15 años de trailero y hace dos años fue despojado de su dinero en la carretera de Ciudad Obregón, Sonora; el chofer se estacionó a la orilla de la carretera cuando dos sujetos lo abordaron.
Una segunda ocasión fue en el poblado El Hongo, Tecate, el conductor se encontraba descansando y al levantarse observó que la caja del vehículo estaba abierta, pero como transportaba agua los delincuentes no se llevaron nada.
También comentó que tiene compañeros que han sufrido asaltos en la carretera de San Luis Río Colorado, Sonora, en donde le quitaron el tráiler y éste aún no ha sido localizado.
Otro de los entrevistados, quien prefirió permanecer en anonimato, comentó que en el 2000 lo asaltaron en la carretera México-Querétaro; llegó a un baño público y los sujetos lo despojaron de su tráiler.
Traileros de Monterrey, Puerto Peñasco y Hermosillo coincidieron que en toda su trayectoria no han presenciado un asalto en carreteras.