Momentos de angustia vivieron pasajeros del vuelo 190 con destino a Mexicali cuando se vieron obligados a utilizar mascarillas de oxígeno por una falla en la aeronave que tuvo que aterrizar de emergencia.
El avión despegó de la Ciudad de México la noche del martes y fue casi al mediodía del miércoles cuando pudo aterrizar en la capital del Baja California.
Aunque la aerolínea no emitió un posicionamiento oficial, los pasajeros compartieron su experiencia e indicaron que fueron notificados de que el avión había sufrido una despresurización, es decir la pérdida del aire al interior.
El piloto desvió el vuelo y aterrizó de emergencia en el aeropuerto de Guadalajara, Jalisco.
“Cayeron las mascarillas de oxígeno y nos pidieron utilizarlas, nos decían que era una despresurización y hubo personas que entraron en crisis”, refirieron algunos viajeros.
En el vuelo 190 venía el presidente de la Canaco Mexicali, Juan Ramón López Naranjo, quien refirió que la situación sorprendió también a la tripulación.
“Había zozobra porque nadie sabía qué estaba pasando realmente, lo novedosos de esto y platicábamos con los sobrecargos es que tanta experiencia que tienen volando y nunca les había pasado que salieran las mascarillas”.
Agregó que los pasajeros no sintieron turbulencia, sino únicamente un calor intenso.
En la aeronave viajaba también Santos González Yescas, alcalde de San Luis Río Colorado, Sonora, quien se dijo tranquilo después del susto.
“Nos hicieron bajar de emergencia en Guadalajara, lo manejaron muy bien los pilotos y damos gracias a Dios de que no fue un incidente grave, no es fácil a tantos metros arriba y no asustarse”.
Aeroméxico solo proporcionó hospedaje a la mitad de los pasajeros por lo que hubo quienes pasaron la noche en el aeropuerto a la espera de una nueva ruta que los trajera a casa.
