El Mar de Cortés, un paraíso para quienes aman el mar encalma, con oleaje noble y sus cálidas aguas, hogar de especiescomo algunos cetáceos, como la casi extinta vaquita marina y lapredominante totoaba, donde delfines, tiburones, ballenas, lobosmarinos, pepinos de mar y camarones comparten un ecosistema que aldescribirlo de esta forma suena como un atractivo para quienesviven del aprovechamiento pesquero.
Sus aguas son ahora también sinónimo de muerte, mercado negrode grupos dedicados a la captura o pesca ilegal de totoaba,situación que se ha intensificado en estos dos meses del año conla confirmación de hallazgos de animales marinos muertos, lo quedeja al descubierto el uso de artes de pesca ilegal dentro delpolígono de protección de la vaquita marina, una evidenteviolación y falta de vigilancia por parte de las autoridades paraacabar con el furtivismo en zonas como San Felipe.
A pesar de la coordinación que se ha dado conocer por parte delGobierno federal, al parecer los pescadores furtivos encuentranformas de seguir con esta actividad que algunos lugareños de SanFelipe señalan como ‘justificada’ ante la necesidad deconseguir dinero para mantener a las familias del puerto, donde nose puede pescar.
Dejan a la deriva 16 totoabas sin buches
Aunque algunos pescadores han señalado a la organizacióninternacional protectora de fauna marina Sea Shepherd ConservationSociety como presunta agresora de quienes pescan en aguas que aúnse mantienen en veda, defensores ambientalistas dieron a conocer elhallazgo de 16 totoabas sin vida a la deriva.
Lo anterior fue confirmado por la organización, dejando enclaro que este hallazgo ocurrió el pasado 5 de febrero, cuando latripulación de la embarcación “M/V Sam Simon” halló 16cuerpos de totoaba en las aguas del Golfo de California, en la zonade San Felipe.
Los cuerpos de estos peces que han sido protegidos por laSemarnat y por los cuales se mantiene una aparente vigilancia porparte de las autoridades federales, fueron extirpados, es decir, yano tenían la vejiga natatoria o buche, que es comercializado enpaíses asiáticos por sus supuestas propiedades regenerativas yafrodisíacas.
En la gráfica se observa el estado de descomposición de loscuerpos de estos peces. Según la organización, tanto pescadoresilegales o totoaberos como los cárteles mexicanos están acabandocon este pez en peligro de extinción, pues al exportar su vejiganatatoria se vende en el mercado negro de China y Hong Kong pormás de 20 mil dólares el kilo.
Imparable el daño al ecosistema
No solo especies como la marsopa endémica del Alto Golfo deCalifornia están en peligro por el uso de artes de pesca, puestambién los tiburones son presa fácil de estas redes que impidensu libre nado.
Como muestra se tiene registro en Sea Shepherd que el pasado 15de febrero el “M/V Farley Mowat” recuperó tres redes detotoaba de las costas de San Felipe, a tan solo unos cuantoskilómetros del refugio vaquita marina, encontrándose dostiburones muertos, uno de 1.10 metros y otro más de 1.70.
Se presume que estos ejemplares perecieron debido a unasofocación larga y dolorosa mientras luchaban por escapar de estasredes, lo cual alerta a los ambientalistas al considerar queexisten miles de redes en esta área que atrapan todo tipo de vidasilvestre, condenando a los animales que caen en éstas a unamuerte lenta y agonizante.
Un tercer tiburón fue descubierto por la tripulación en lamisma red. Sin embargo, se hundió cuando la red fue levantada y nose pudo hacer una identificación exacta.
A esto se le suma que el pasado 11 de febrero, tres días antesdel Día Mundial del Amor por Delfines, la organización descubrió14 cuerpos de ejemplares flotando en el Mar de Cortés y por lomenos dos mostraban signos de muerte violenta, con marcas en suscuerpos, heridas o aletas cortadas crudamente para que el pescadorlas retirara rápidamente de sus redes, confirmaron defensores deanimales marinos.
Como resultado de las acciones, se detalló que en este últimomes la tripulación de la nave “Sam Simon” ha recuperado 22redes ilegales en el Mar de Cortés, por lo que se aseguró quecuando se presenta una situación como ésta, Sea Shepherd notificaa la Profepa para que se cuente con un registro por parte de lasautoridades mexicanas.
Respalda Estado freno a pesca ilegal
Consciente del impacto que representa la pesca ilegal en elsector pesquero y acuícola, el titular de la Secretaría de Pescay Acuacultura del Estado, Matías Arjona Rydalch, considerónecesario endurecer las penas para quienes efectúan la pescailegal, exigiendo su tipificación como delincuenciaorganizada.
Este argumento se basa en el apoyo al nuevo dictamen aprobadopor el Senado de la República en el que se tipifica como delitofederal la captura dolosa, acopio, transporte, destrucción ycomercio de camarón y pepino de mar dentro o fuera de losperíodos de veda, sin contar con la autorización correspondientey en una cantidad que exceda 10 kilogramos de peso.
Lo anterior, dijo, se encuentra en el proyecto de decreto quereforma la fracción II bis del artículo
420 del Código Penal Federal y adiciona una fracción alartículo 2 de la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada,aprobado por la asamblea con 85 votos a favor y enviado alEjecutivo para sus efectos constitucionales.
Esto, explicó, “establece que cuando tres o más personas seorganicen en forma permanente o reiterada para cometer algúndelito contra el ambiente, previsto en la fracción IV delartículo 420 del Código Penal Federal, serán sancionadas comointegrantes de la delincuencia organizada”.