Tras la orden que emitió un juez de Estados Unidos para proceder contra México en un embargo pesquero como medida de protección urgente a la vaquita marina, el Gobierno del Estado permanece atento a los posibles impactos económicos que dicha medida podría traer, indicó Francisco Rueda Gómez, secretario general de Gobierno.
Trascendió que el juez federal de la Corte Internacional de Comercio de Estados Unidos tomó la determinación bajo el argumento de que solo quedan 15 ejemplares de la especie y que muchas han muerto al quedar enredadas en las redes de los pescadores.
Rueda Gómez dijo que el Estado está enterado de la situación por lo que a través de la Secretaría de Pesca estatal (Sepesca) se mantiene comunicación permanente con la Comisión Nacional de Pesca (Conapesca). “Nosotros colaboramos solamente con Conapesca, en esta coordinación que tenemos colaboramos con ellos escuchando y viendo cuáles pudieran ser los impactos negativos y algunas opciones que pudieran presentarse para mitigar este impacto”.
La medida trae un impacto directo hacia las especies de camarón, chano, curvina y sierra capturadas con las conocidas redes de enmalle en las aguas del Alto Golfo de California, hábitat natural de la vaquita marina. Destacó que la Conapesca es la dependencia encargada de atender el tema y las imposiciones hechas por las autoridades de Estados Unidos, mismas que se desprenden del plan de protección hacia la especie endémica de Baja California.
El Gobierno del vecino país había solicitado un plazo para dictar el embargo, con la intención de crear un certificado que permitiera la importación solo de las especies capturadas con artes de pesca permitidos y no nocivos para la especie.