A cuatro semanas de que asuma la gubernatura de Baja California Marina del Pilar Ávila Olmeda, señaló que analizará si continuará en el cargo como fiscal general Guillermo Ruiz Hernández. “Él tiene un plazo, y bueno, eso se estará analizando en su momento”, respondió Ávila sin dar mayores detalles del tema.
Guillermo Ruiz Hernández, compadre del gobernador Jaime Bonilla Valdez, tiene en el cargo dos años de los seis por el que fue electo y su permanencia depende del Congreso local.
El 1 de noviembre el Congreso de la pasada XXIII Legislatura de Baja California aprobó con 23 votos a favor y rindió protesta a Guillermo Ruiz Hernández como fiscal general de Baja California, el cargo es de seis años, es decir, del 2019 al 2025.
Hubo un intento fallido para ampliar el periodo de seis a nueve años, una iniciativa del gobernador Jaime Bonilla Valdez que pretendía reformar el artículo 70 de la Constitución Política de Baja California en la que postergaba la duración del fiscal general hasta el 2028, incluso un periodo mayor al del Presidente de la República, iniciativa que no prosperó, del que Ávila Olmeda se pronunció en contra por considerarlo anticonstitucional.
La gobernadora electa dijo que el objetivo de su administración, que inicia el 1 de noviembre, será disminuir los homicidios y que las cinco ciudades de Baja California salgan de la lista de las 50 ciudades más violentas del país, la principal estrategia estatal será una reforma de ley para el regreso de Secretaría Estatal de Seguridad Pública y este domingo anunció que Ricardo Iván Carpio Sánchez será el coordinador para la creación de esa dependencia.
“Por eso mismo vamos a crear Secretaría de Seguridad Ciudadana para el estado, en la cual estableceremos una estrategia verdaderamente coordinada para sacar a los municipios de Baja California de esa lista de 50 municipios (más violentos) a nivel nacional, donde lamentablemente todos los ayuntamientos del estado están”, agregó.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado fue extinta en el gobierno de Jaime Bonilla Valdez y convertida en la Guardia Estatal de Seguridad e Investigación (GESI), que depende de la Fiscalía General del Estado, solo duró dos años, pues se regresará la Secretaría de Seguridad como en las administraciones panistas.
Ávila Olmeda dijo que su relación con el gobernador Jaime Bonilla era únicamente institucional por la entrega de recepción, pero que “no todo ha fluido como debería” y con ello confirma que no existe una relación cercana con el mandatario estatal, luego de los enfrentamientos de declaraciones que han mantenido ambos por el tema de municipalización de los organismos del agua.
“Una relación institucional, una relación la cual está en proceso de entrega de recepción, nosotros seguiremos trabajando de la misma forma”, indicó.
Sobre las finanzas estatales dijo que “está complicada la situación financiera del estado”.