Con la llegada del verano y las altas temperaturas a la ciudades común que el estrés con el que viven la mayoría de laspersonas aumente, ya que la sensación de calor propicia que seamosmenos tolerantes con lo que nos rodea, indicó la doctora JulietaBonilla profesora de tiempo completo de la Escuela de Psicologíadel CETYS Universidad en Mexicali.
caLa adémica explicó que el cambio abrupto hacia el calorgenera el medio para que los estresores, es decir, las tareas deldía a día que un individuo debe resolver como parte de su rutinase hagan más pesadas psicológicamente al verse reducido el umbralde tolerancia.
La vida diaria, agregó, es a las carreras, todos tenemos prisapor terminar una tarea para iniciar otra, sin embargo, en las altastemperaturas se acelera nuestro organismo, nos volvemos menostolerantes, más sensibles y si no sabemos modular o manejar elestrés, la sensación de calor puede desencadenar hasta lesionesfísicas, aseguró.
Refirió que el nivel de estrés es en sí lo que hacemás susceptibles a los individuos no en tanto calor “hay querecordar que el estrés es lo que se genera al tener muchas cosaspor llevar a cabo y para lograrlas todas nos tenemos que fragmentare ir afrontando uno a uno los retos diarios, sino sabemos cómohacerlo ahí inician los problemas…”.Julieta Bonilla explicó que existen diversas técnicas paracanalizar el estrés y que éste no se vea afectado por el calor“lo más factible es ir elaborando las labores secuenciales y notodo al mismo tiempo…”.
De igual forma invitó a estar muy alertas con relación alestrés sobre todo en verano “si las alteraciones son muyrecurrentes y finalizan en actos de histeria, lo ideal es acudir aexpertos en la salud mental para mejor calidad de vida…”.