Un grupo de ocho ciudadanos rusos se aloja desde hace unos días en el albergue Alfa y Omega de la zona centro de Mexicali.
Ahí esperarán una cita para pedir asilo político a las autoridades migratorias de Estados Unidos.
Vladimir Kuznetsov, de 26 años, indicó que huyen de la represión y militarización que se padece en su país.
El joven ruso llegó solo a Mexicali, dejando a sus padres y hermanos allá.
"Cuando salimos del país somos considerados traidores".
Los rusos hablan un poco de inglés pero se apoyan con un traductor para poder comunicarse con los encargados del albergue Alfa y Omega dónde conviven con más de cien migrantes mexicanos y centroamericanos.