Tijuana.-Aunque la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris) ha dicho que las playas ya son aptas para uso recreativo, la asociación Costa Salvaje advirtió a la población de los riesgos de ingresar al litoral tijuanense.
El presidente ejecutivo de la organización, Serge Dedina, alertó que los niveles de contaminación son muy elevados, que han llevado a cerrar las playas de Imperial Beach y Coronado, probablemente el resto de 2023.
“Las autoridades que nunca se meten a la playa y el mar, siempre nos dicen que está abierto, cuando ya estamos sufriendo playas contaminadas. Nos regañan cuando decimos la verdad, yo no puedo llevar mi vida, ni la realidad, dependiendo de lo que digan en Mexicali”, aseveró.
El activista señaló que Costa Salvaje catalogó a los gobiernos de Tijuana y Baja California, como “los peores contaminadores de América del Norte”, debido a la ineficiencia para controlar los derrames de aguas negras y la falta de inversión en proyectos como Punta Bandera.
“Es un escándalo y no lo entendemos, porque hay una solución muy sencilla, que es reparar Punta Bandera y hacer el reúso de agua”, comentó.
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Aseguró que la contaminación está “peor que nunca”, y en Imperial Beach se han perdido los últimos tres años con las playas cerradas, como consecuencia de la problemática, sumándose ahora Coronado.
“Es casi 30% de la zona costera de San Diego cerrada, el motor económico, Coronado es un motor económico de turismo en San Diego y da miles de empleos a gente que también vive en Tijuana”, manifestó.
Por su parte, Rosario Norzagaray, coordinadora de Residuos Marinos de la misma organización, exigió que resuelvan esta problemática que se origina en la Planta de Punta Bandera que derrama más de mil 700 litros por segundo sin cumplir con la normativa vigente. “Solo le ponen cloro y la echan al mar", afirmó Norzagaray.
En ese sentido, Laura Wilkinson Sinto, empresaria y activista comunitaria que vive cerca de las playas de Coronado, afirmó que el actual contexto de contaminación que hay en las playas de ambos lados, repercute en otros ámbitos.
“Tenemos una crisis sanitaria y económica que está dañando la reputación de México como potencia económica. Está dañando la salud pública de las comunidades en ambos lados de la frontera, la salud de los NAVY Seals que entrenan en Coronado y poniendo en peligro los negocios y las industrias turísticas de Tijuana, Playas de Rosarito, Imperial Beach y Coronado”, aseguró.