Durante el verano también se acostumbra inscribir a los niños a campamentos o cursos en los que tienen contacto con albercas o humedad en general.
Es común también ver que a los niños se les genere una infección en el conducto auditivo, lo cual genera lo que le denominan otitis externa. Esto ocurre entre la oreja y el tímpano cuando hay un constante contacto con el agua o un sitio húmedo, después de que no se secó bien el menor o incluso si el agua no estaba en las mejores condiciones de pureza.
La otitis puede manifestar dolor, inflamación, enrojecimiento y también la salida de un líquido seroso o pus.
Es importante consultar un pediatra para dar el tratamiento adecuado.
Asimismo, por caminar en superficies húmedas, los niños pueden contraer micosis plantar, padecimiento mejor conocido como pie de atleta.
Para prevenirla, solo se debe de procurar utilizar sandalias y secarse bien los pies después de haberlos mojado.
Juan Ángel de León Garza indicó que también es común que los niños sufran algún tipo de quemaduras ocasionadas por estar expuestos al sol, por lo que deben de utilizar un bloqueador con Factor de Protección solar de 50 o más.
Sobre todo, recomendó evitar la exposición directa al sol, al menos entre las 10:00 y las 16:00 horas.