Un alza de entre el 10 y el 12% anual en el costo de las viviendas en Baja California se ha detectado en los últimos dos años, reconoció el presidente de la Cámara Nacional de la Vivienda (Canadevi) en Baja California, Raúl Grajeda Cerón.
Esto a consecuencia de un incremento en los precios de materiales para la construcción, tales como el acero y el cemento, el cual fue de entre el 27 y 34% durante el 2021 y 2022.
“Nuestra zona sigue construyendo mucho a nivel ‘block’, y todo lo que es el cemento, concreto y sus derivados han tenido incrementos importantes, tuvimos también incrementos muy relevantes en el acero; estos dos componentes son entre el 70 y el 80% del costo del material de la vivienda”
A esto se suma, además, la caída que tuvo el sector de construcción de vivienda a nivel nacional, no sólo en Baja California, a consecuencia de la pandemia Covid-19, lo que redujo la disponibilidad de viviendas accesibles en el estado.
De igual forma, los costos se ven afectados por los niveles de inflación en el país y el efecto que estos tienen en el incremento del costo de combustibles y trámites legales.
Otro de los aspectos que puede influenciar el precio de una vivienda, recordó Grajeda Cerón, es la ubicación que esta tiene en la ciudad, dado que los valores de los predios varían de forma importante dependiendo cada zona de Mexicali.
BENEFICIO DIRECTO
El presidente de Canadevi reconoció que uno de los efectos positivos de este tipo de incrementos en los precios es el aumento de la plusvalía de las viviendas, lo cual puede resultar beneficioso para sus propietarios.
“Alguien que compró en el pasado una vivienda a determinado precio, si hoy la estuviera vendiendo, seguramente la estaría vendiendo a un precio mayor del que la compró, ese beneficio va directo para el que tiene esa vivienda”
Según explicó Grajeda Cerón, en Baja California existen diferentes modelos de vivienda, los cuales se dividen principalmente en dos sectores; la vivienda social, que engloba a aquellas casas con valores de menos de 700 mil pesos hasta el millón de pesos y la vivienda media o residencial, que no tiene límite de precio.
Aunque autoridades de diversos niveles de gobierno han buscado incrementar la disponibilidad de vivienda social mediante diversos programas, durante los últimos años se ha reportado una reducción en la oferta de este tipo de casas en el estado.