/ miércoles 14 de febrero de 2024

Advierten sobre riesgos de compartir datos personales en apps de citas 

De manera inconsciente, consentimos a las aplicaciones que usen información sensible

Al momento de aceptar las condiciones de una aplicación para encontrar pareja, le vendemos “nuestra alma al diablo”, ya que se otorga información sensible del usuario, que en un algoritmo se cruza con la información sensible de otra persona, para encontrar a alguien afín.

Flor Fierro | Docente de tiempo completo de la Escuela de Derecho de Cetys Universidad

Flor Fierro | Docente de tiempo completo de la Escuela de Derecho de Cetys Universidad / Foto: Alejandro Domínguez / La Voz de la Frontera

Lo anterior lo manifestó Flor Fierro, docente de tiempo completo de la Escuela de Derecho de Cetys Universidad, al referir los riesgos de las aplicaciones en general, pero que, en las dedicadas a encontrar pareja, son especialmente sensibles.

“Toda la tecnología puede jugar a nuestro favor o en nuestra contra en el sentido del derecho, porque si bien, nos facilita la vida, hay consecuencias de la rapidez, y una de las consecuencias incluso cuando configuramos una computadora y entramos a estas aplicaciones de Facebook, Instagram y más las de pareja, te piden que llenes unos datos, y son tus datos personales.

“Y viene una especie de aviso de privacidad donde no nos damos el tiempo para leerlo porque queremos llegar rápido a la aplicación y ver como se usa, incluso ChatGPT y todo eso, entonces le damos aceptar sin leer los términos y condiciones”.


Pero si no se aceptan los términos y condiciones de las aplicaciones, entonces no hay acceso a la aplicación, por lo que se debe legislar al respecto, señaló la catedrática de la Escuela de Derecho.

Es algo así como venderle el alma al diablo, expresó, ya que vendes tus datos personales, y esto está regulado en México, en el segundo párrafo del Artículo 16 de la Constitución Política mexicana, en la que toda persona tiene derecho a que su privacidad se proteja.

También se encuentra la Ley Federal de Protección de Datos Personales, publicada en el gobierno del ex Presidente Felipe Calderón, que es para los particulares, posteriormente salió la del sector público, ya que por ejemplo, al momento de pagar el agua, la dependencia tiene tus datos personales.

Explicó que los datos personales se refieren a toda aquella información de la persona en su esfera más íntima, y estos se dividen en sensibles, patrimoniales y económicos, y en estas famosas aplicaciones damos los datos más vulnerables o sensibles.

La catedrática expuso que los datos sensibles son sexo, religión, afiliación política, y generalmente se dan estos datos para conocer a la gente, ya que estas aplicaciones tienen algoritmos de afinidad, ya que se da esta información, e incluso se paga por la suscripción, por lo que también cuentan con los datos patrimoniales.

Lo que hace la aplicación es un cruce de información sensible para encontrar una pareja afín, pero se trata de datos personales, señaló Flor Fierro.

En México hay un mercado enorme de datos personales, lo que es un delito, pero es algo muy difícil de perseguir porque la policía cibernética está en pañales y no se cuenta con la infraestructura necesaria para perseguirlo.

Es por la venta de estos datos que se dan las llamadas de extorsión, ya que la información la tienen los bancos y las aplicaciones en las que se han inscrito, y hay una serie de empresas formales e informales que compran esta información.

Esta venta es castigable, en los casos que hay acción penal, la sanción es cárcel, pero en los casos administrativos interviene el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI), que también se encarga de la protección de los datos personales.

Es decir, una persona puede presentar una denuncia al INAI por el mal uso de los datos personales, que tienen un plazo de 50 días para resolver, por eso es tan importante este instituto, ya que los datos que proporcionamos, deben desaparecer.

También existen los famosos derechos ARCO, que son de Acceso, Rectificación, Cancelación y Oposición, en la cual se pueden presentar las denuncias por internet.

En el caso de las aplicaciones, no se requieren ni meter los datos, solo se necesita dar el consentimiento a la aplicación que use los datos de la persona que están en Google, y de inmediato hay transmisión de datos, sin tomar en cuenta las consecuencias jurídicas y patrimoniales.

Es decir, la cuenta Google pasa la información de datos e incluso la financiera, y todo ello con nuestro consentimiento, expuso Flor Fierro.

Al momento de aceptar las condiciones de una aplicación para encontrar pareja, le vendemos “nuestra alma al diablo”, ya que se otorga información sensible del usuario, que en un algoritmo se cruza con la información sensible de otra persona, para encontrar a alguien afín.

Flor Fierro | Docente de tiempo completo de la Escuela de Derecho de Cetys Universidad

Flor Fierro | Docente de tiempo completo de la Escuela de Derecho de Cetys Universidad / Foto: Alejandro Domínguez / La Voz de la Frontera

Lo anterior lo manifestó Flor Fierro, docente de tiempo completo de la Escuela de Derecho de Cetys Universidad, al referir los riesgos de las aplicaciones en general, pero que, en las dedicadas a encontrar pareja, son especialmente sensibles.

“Toda la tecnología puede jugar a nuestro favor o en nuestra contra en el sentido del derecho, porque si bien, nos facilita la vida, hay consecuencias de la rapidez, y una de las consecuencias incluso cuando configuramos una computadora y entramos a estas aplicaciones de Facebook, Instagram y más las de pareja, te piden que llenes unos datos, y son tus datos personales.

“Y viene una especie de aviso de privacidad donde no nos damos el tiempo para leerlo porque queremos llegar rápido a la aplicación y ver como se usa, incluso ChatGPT y todo eso, entonces le damos aceptar sin leer los términos y condiciones”.


Pero si no se aceptan los términos y condiciones de las aplicaciones, entonces no hay acceso a la aplicación, por lo que se debe legislar al respecto, señaló la catedrática de la Escuela de Derecho.

Es algo así como venderle el alma al diablo, expresó, ya que vendes tus datos personales, y esto está regulado en México, en el segundo párrafo del Artículo 16 de la Constitución Política mexicana, en la que toda persona tiene derecho a que su privacidad se proteja.

También se encuentra la Ley Federal de Protección de Datos Personales, publicada en el gobierno del ex Presidente Felipe Calderón, que es para los particulares, posteriormente salió la del sector público, ya que por ejemplo, al momento de pagar el agua, la dependencia tiene tus datos personales.

Explicó que los datos personales se refieren a toda aquella información de la persona en su esfera más íntima, y estos se dividen en sensibles, patrimoniales y económicos, y en estas famosas aplicaciones damos los datos más vulnerables o sensibles.

La catedrática expuso que los datos sensibles son sexo, religión, afiliación política, y generalmente se dan estos datos para conocer a la gente, ya que estas aplicaciones tienen algoritmos de afinidad, ya que se da esta información, e incluso se paga por la suscripción, por lo que también cuentan con los datos patrimoniales.

Lo que hace la aplicación es un cruce de información sensible para encontrar una pareja afín, pero se trata de datos personales, señaló Flor Fierro.

En México hay un mercado enorme de datos personales, lo que es un delito, pero es algo muy difícil de perseguir porque la policía cibernética está en pañales y no se cuenta con la infraestructura necesaria para perseguirlo.

Es por la venta de estos datos que se dan las llamadas de extorsión, ya que la información la tienen los bancos y las aplicaciones en las que se han inscrito, y hay una serie de empresas formales e informales que compran esta información.

Esta venta es castigable, en los casos que hay acción penal, la sanción es cárcel, pero en los casos administrativos interviene el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI), que también se encarga de la protección de los datos personales.

Es decir, una persona puede presentar una denuncia al INAI por el mal uso de los datos personales, que tienen un plazo de 50 días para resolver, por eso es tan importante este instituto, ya que los datos que proporcionamos, deben desaparecer.

También existen los famosos derechos ARCO, que son de Acceso, Rectificación, Cancelación y Oposición, en la cual se pueden presentar las denuncias por internet.

En el caso de las aplicaciones, no se requieren ni meter los datos, solo se necesita dar el consentimiento a la aplicación que use los datos de la persona que están en Google, y de inmediato hay transmisión de datos, sin tomar en cuenta las consecuencias jurídicas y patrimoniales.

Es decir, la cuenta Google pasa la información de datos e incluso la financiera, y todo ello con nuestro consentimiento, expuso Flor Fierro.

Local

Botana saludable como alternativa a comida chatarra

La familia Apodaca emprendieron un negocio familiar denominado Grins

Local

Piden trigueros al menos 320 dólares por tonelada

Esperan presionar a los industriales para que estos mejoren su oferta

Local

Encabeza Tecate los incendios forestales en BC

Alrededor del 29 por ciento de esos siniestros son provocados por quemas de basura

Local

Asciende inversión a Serie del Caribe a 125 mdp

Aún faltan obras por valorar, comentó el Secretario de Infraestructura en Baja California