De acuerdo con estudios recientemente publicados, los pacientes graves de Covid-19 agudo, tras haber sido hospitalizados y posteriormente recuperados, continúan manifestando malestares, afectación en los diferentes órganos, con consecuencias incapacitantes o hasta fatales, semanas o meses después del alta hospitalaria.
Esto representa un riesgo de que las secuelas del Covid-19 agudo duren más que la pandemia, de no tener un manejo adecuado. Por ello, médicos de diferentes especialidades hicieron un llamado urgente para que se haga seguimiento a estos pacientes y a establecer una estrategia clara que permita hacer frente a este problema llamado síndrome post Covid-19, que puede convertirse en una crisis de salud pública.
“El Covid-19 no finaliza cuando los síntomas de la enfermedad aguda desaparecen. La evidencia científica y clínica que se tiene al momento, señala que hasta el 80% de quienes padecieron la enfermedad presenta alguna secuela. Ahora conocemos que se trata de una enfermedad de múltiples órganos con un amplio espectro de manifestaciones y las consecuencias se agudizan de acuerdo a la gravedad de la infección. Por ello es fundamental dar seguimiento puntual y prepararnos para dar una atención humanizada y digna para los pacientes que han padecido la versión grave de la enfermedad”, señaló el doctor Jorge Luis Poo Ramírez, médico internista y director fundador de Amigos del Hígado A.C.
Agregó el doctor Poo que “hay varios pendientes que pueden detonar una nueva crisis: los hospitales que se transformaron y acondicionaron para la atención de enfermos durante la pandemia, no siempre dan seguimiento a los pacientes, ni hay consulta subsecuente. Por otro lado, muchos (de los pacientes) no regresan a su unidad médica a tiempo. Esto puede devenir en un problema mayor, ya que entre 20-25% de quienes tuvieron Covid grave necesitan hospitalización y hasta un 15% pueden morir de los primeros 30 días después del alta hospitalaria. Lo ideal sería que los pacientes Post-Covid graves sean atendidos en centros multidisciplinarios, para dar asesoría en alimentación, fisioterapia y salud mental”.
Un estudio publicado por The Lancet al inicio de este año, señala que las secuelas por Covid-19 pueden persistir hasta seis meses después de que las personas hayan sido infectadas. Los resultados arrojaron que el 76% de los pacientes presentó algún nuevo síntoma; 66% fatiga y dolor muscular; 26% trastornos del sueño y 23% ansiedad o depresión .
En tanto Nature, en su más reciente publicación de estudios de seguimiento a cuatro y seis meses muestran crecientes efectos persistentes y prolongados después del Covid-19 agudo. Por su parte, BMJ publicó un estudio con seguimiento a 140 días, en 47 mil 780 pacientes, en donde se encontró que 14 mil 060 de ellos fueron re-admitidos en el hospital, y murieron después de su alta cinco mil 875 pacientes, (más de uno de cada 10), cifras cuatro y ocho veces mayor que en el grupo control.
Para hablar y pensar en Covid-19, como un padecimiento no solo agudo, sino que debe haber un enfoque específico de seguimiento y manejo a largo plazo, el próximo 26 de mayo, se llevará a cabo un conversatorio con especialistas en neumología, medicina interna, psiquiatría, en economía de la salud, para abordar de forma integral, una discusión reflexiva y disruptiva sobre este tema. “En este espacio buscaremos generar el mensaje de que el paciente deje de ser paciente-víctima y se convierta en proactivo. Por otro lado, queremos llegar a todos los médicos que sean más empáticos y que les transmiten información adecuada y oportuna a sus pacientes; y, por otro lado, llamar a aquellos médicos que aún no humanizan su atención, a que puedan ser sensibles a las necesidades de las personas a las que atienden.