Tijuana.- La sana alimentación es un tema que va de la mano con la buena salud. Pero debe cambiar o ser distinta para pacientes que padecieron Covid-19. Hay aspectos a tomar en cuenta de acuerdo con José Bruno Roldán Melo, médico cirujano quien hace algunas recomendaciones.
El galeno nos señala que hay tres tipos de pacientes: el que ha sido hospitalizado, el que está en su casa con la enfermedad y el que ha sido intubado.
“Pareciera que podríamos dar una respuesta sencilla, pero en realidad es un poco complejo por la dimensión de la enfermedad. Hay pacientes que llegaron a estar intubados y perdieron mucha masa muscular, lo cual quiere decir que como no manejaban sus brazos, sus piernas, empezaron adelgazar y aquí lo que más se afecta es la proteína, que conseguimos en la carne, en el pollo, en el pescado”.
Detalló que los enfermos que están en su casa aislados y que no les da el sol, empiezan a tener déficit de la vitamina D. En ese sentido explicó que necesitan el sol para metabolizar y para todos los cambios bioquímicos que necesita el cuerpo.
“El paciente que llega a estar hospitalizado y que pasan ese proceso, tienen que estar consumiendo más cítricos como la naranja, el limón, a veces con todo y cáscara porque eso ayuda a bloquear los ra- dicales libres que se producen en el cuer- po. Estos aumentan en tal cantidad que mantienen a la persona enferma. Por eso muchos que tuvieron Covid, dicen que aún se sienten enfermos por todos estos radicales libres que están en su cuerpo”.
Al respecto indicó que para ellos es necesario el ejercicio, porque es una forma de drenar el cuerpo y ayudarle a que transpire todos esos productos que se formaron en la enfermedad.
Apuntó que lo que se tiene que fortalecer es el sistema inmunológico, y para ello lo que mejor sirve es el ajo, es decir, acompañar las comidas con ajo, “comer un cuartito todos los días o una cápsula para los que no les gusta el olor. El sistema inmunológico de alguna forma se debilitó y tenemos que fortalecerlo. Tenemos que comer más alimentos de color verde, o frutas o verduras, porque estos ayudan a bloquear todos los radicales libres que te- nemos en la sangre y así no sentirnos con fatiga y cansancio”.
Destacó que lo que están haciendo las personas con el cubrebocas, lavarse las manos continuamente es importante pero la enfermedad, una vez que se adquiere, hay que aprender a vivir con ella.
Dijo que a nivel mundial se ha visto que el ejercicio es una forma sana de fortalecer los pulmones, la circulación y que también el sistema inmunológico mejore.
“Hubo alguna deficiencia de alguno de estos, por eso nos atrapó la enfermedad, a unos más graves que a otros. Las personas que son diabéticas ya tienen una alimentación específica porque son los más vulnerables. Toda persona diabética lo más probable es que puedan llegar a fallecer, pero si se recuperan tienen que ser más estrictos con su alimentación porque los altos niveles de glucosa en la sangre son peligrosos”, comentó.
Advirtió que por eso se les indica que etiren los refrescos o sodas de su alimentación, los dulces porque eso favorece a las infecciones virales como a las bacterias o parásitos, “es alimento para ellos y por eso se reproducen en una cantidad superior”.
Señaló que las personas de bajos recursos consumen muchas bebidas sabor cola y eso hace que tengan demasiada azúcar en su sangre, por eso son más vulnerables o su sistema inmunológico es menos fuerte. Expuso que de cada 10 personas, nueve enferman por malos hábitos. Por ejemplo, comen muchos carbohidratos, hay exceso en el consumo de pan, de tortilla. Comentó que es uno de los desafíos qué hay en México porque tenemos el primer lugar en obesidad a nivel mundial.
“Por eso decimos desayuna como rey, come como príncipe y cena como mendigo. El desayuno por ejemplo unos huevos con jamón, fruta, jugo de naranja, vegetales carne pollo. Siempre anteponiendo por ejemplo, en la mañana, fruta y al mediodía vegetales y tres horas antes de dormir no debes de haber comido nada para que esto no afecte tu metabolismo y puedas descansar, que es uno de los problemas que comúnmente tenemos es importante poner atención a las entre comidas o las cenas. En México las taquerías las hay por todos lados, es un poco complicado pero con que coman tres horas antes de irse a dormir, ya se dio el proceso de digestión. Pueden dormir porque lo que comieron lo queman y no lo almacenan”.
Manifestó que el cuerpo humano es como una computadora, porque se tiene que apagar para reprogramarse y si no dormimos bien empezamos a trabajar de forma ineficiente.