Lo que nació por el gusto por viajar y el amor a las artesanías, hoy se ha convertido en una fuente de desarrollo económico para una mexicalense que ve en el impulso del trabajo de manos mexicanas no solo un rédito personal, sino para las familias productoras a nivel nacional.

De profesión licenciada en Ciencias de la Comunicación, Elvia Edith Solís Rodríguez, quien desde hace 10 años trabaja en área de ventas hospitalarias, decidió iniciar, hace poco más de 4 años, con la venta de rebozos realizados por manos de artesanos chiapanecos, que traía cada invierno y vendía entre familiares, amigos y aquellos que se enteraban de su producto.

Hace un año se aventuró y en coordinación con familias de Chiapas y Guerrero, emprendió la venta de bisutería artesanal con ámbar y bolsas hechas a mano con hoja de palma, creando su marca Sharis, bisutería artesanal y detalles.

Siempre me ha gustado lo que es de México, típico mexicano y estaba buscando desde hace tiempo un producto mexicano bueno, de calidad, quería apoyar a los artesanos; poco a poco empecé a contactar proveedores para los rebozos y otra chica también de Chiapas que maneja el ámbar, así que lo que manejo es bisutería con esta piedra y otras más típicas de ese estado

EL EXTRA

Además de buscar en la venta y promoción de sus artículos incrementar su ingreso familiar, ya que es madre de una joven de 14 años, el mostrar y enaltecer el trabajo de las manos mexicanas en esta zona fronteriza, enmarcada por productos de origen chino que en muchas ocasiones carecen de calidad, fue también un impulso para llevar a cabo su propio negocio. y así hacerlo realidad.

Ellos no trabajan para nadie, ellos fabrican sus artículos y yo quería vender algo típico de México y a la vez, apoyar la economía mexicana, es algo que me da orgullo, porque al fin de cuentas si alguien me compra a mí, le compra también a una familia mexicana

Con su #yoapoyoamimexico, Solís Rodríguez busca posicionar el trabajo de manos chiapanecas y guerrerenses en esta frontera norte, en donde a través de colectivos, tan de moda en los últimos años, ha logrado hacerse de un espacio en donde los cachanillas puedan ver y adquirir estos productos tanto en esta ciudad como en San Luis Río Colorado, Sonora.

Como toda nueva empresaria, la lucha por el mejor precio y el buscar un espacio óptimo para ofrecer sus productos, ha sido una de las dificultades que ha tenido que enfrentar, mismas que ha sabido sortear con el paso del tiempo, esperando en no muchos años, poder contar con un espacio propio e incrementar las artesanías mexicanas a ofrecer al mercado local.

Mi idea es ser un punto de apoyo para los artesanos, ya que muchas veces no es valorado su trabajo; poco a poco ir adquiriendo ropa en telares de artesanos mexicanos e ir incrementado en mercancía y más adelante, no en mucho tiempo, poner un local totalmente mío