Da músico giro a su profesión para sanitizar negocios

A raíz de la continencia, el músico Pablo León vio en los productos sanitizantes y virucidas la manera de obtener ingresos y salir adelante

Dulce María Díaz | La voz de la Frontera

  · lunes 30 de noviembre de 2020

El Covid-19 ha obligado a los establecimientos a implementar rigurosos hábitos de higiene y sanidad en cada una de sus áreas | Cortesía Oxyprotex

La pandemia del Covid-19 ha dejado un panorama incierto en materia económica. Sin embar- go, algunos que aun quedándose sin un ingreso en este periodo de contingencia y aislamiento, han visto la manera de salir adelante e ingresar a un nuevo mercado que llegó para quedarse: Los productos de sanitización.

Pablo León, de profesión músico y maestro, ha visto afectada su economía desde hace tres meses que se registró el primer caso de coronavirus en la ciudad y se dictó el cierre de actividades que a él, como a cientos que viven de las tocadas musicales en bodas y 15 años, quebrantó por mucho su economía familiar.

Este líquido desinfectante puede aplicarse en la piel, la ropa y los zapatos al llegar de la calle a la casa | Cortesía Oxyprotex

Cursos en repostería le ayudaron a dar forma a su principal menú | Víctor Félix | Tribuna de San Luis

“Yo soy maestro en escuelas públicas, pero tengo muy pocas horas; mi entrada fuerte son los eventos sociales, las tocadas en fiestas y clases particulares de música y con esta contingencia se tuvieron que cancelar”.

EL PROYECTO

A mediados de marzo, Pablo, buscó allegarse de recursos en la venta de jabones antibacteriales, lo cual no fue del todo favorable, por lo que su amigo, el ingeniero Luis Valenzuela lo invitó a iniciar un proyecto denominado OxyProtex, en donde ofrecen un producto 100% cachanilla que apoya a la sanitización de los hogares.

OxyProtex es líquido desinfectante, virucida y bactericida, que ejerce su actividad al descomponerse en ácido acético, peróxido de hidrógeno y oxígeno, subproductos no dañinos para la salud, los cuales pueden ser aplicados tanto en la piel como en ropa y zapatos al llegar de la calle y entrar a empresa o residencia.

Deli Crepa y La Pollería actualmente reciben a sus comensales en un solo local | Sergio Caro | La Voz de la Frontera

“En este período el crecimiento ha sido exponencial y a pasos agigantados, de vender dos galones a la semana, me pasó la siguiente semana a 15 y la otra a 40 galones, además de que empezamos con las sanitizaciones y la venta de tapetes que ha ido acrecentando el negocio”.

EN CRECIMIENTO

Lo que para muchos ha sido un tiempo de resguardo, para otros, como Pablo León, ha sido de emprendimiento y trabajo arduo, el cual por el giro comercial que ha elegido seguirá en crecimiento constante, pues el Covid-19 ha generado nuevos hábitos de higiene y sanidad.

“Tenemos que cuidarnos entre nosotros, hay empresas que por vender están haciendo las cosas de manera maliciosa agarrando cualquier producto y dañando a la gente; nosotros no, porque aunque lo hicimos para salir adelante, tratamos de ofrecer lo mejor para nuestros clientes”.