Para Salma Hayek, productora ejecutiva de la nueva adaptación de la novela, "Como agua para chocolate", una historia que se desarrolla en el periodo de la revolución, hace más de 100 años, la serie refleja la tenacidad histórica de las mujeres por encontrar libertad.
"Esta es una historia de cambios políticos en el país, pero también adentro de las casas, cómo las mujeres siempre hemos tenido que luchar para tener una voz o control de nuestro destino", explicó por vía remota en conferencia de prensa previa al estreno, en la que también estuvieron presencialmente las protagonistas Ana Valeria Becerril, Azul Guaita, Irene Azuela, Ángeles Cruz y Andrea Chaparro.
La reciente producción, a estrenarse en la plataforma de streaming Max este 8 de noviembre, está basada en la novela homónima escrita por Laura Esquivel, publicada en 1989. La adaptación a la serie, aseguró Salma Hayek, resultó factible debido a las cualidades del texto.
"La señora Laura ha hecho algo tan genial y tan rico de muchas maneras. Una de las cosas que nos ayudó mucho fue el tiempo en el que ella eligió contar esta historia. Hay mucha tela de dónde cortar", dijo sobre el drama, que narra la historia de un amor no correspondido, no por decisión, sino por lo que la sociedad de la época acostumbraba, entre Pedro Muzquiz (Andrés Baida) y Tita de la Garza (Azul Guaita).
De acuerdo a la tradición de la época, la hija menor de cada familia no tenía derecho a hacer su propia vida, porque su destino era cuidar a sus padres cuando éstos fueran mayores.
"Nunca va a pasar de moda, porque siempre va a hablar de cosas que nos impactan a todos", dijo. Por otra parte, se mostró ansiosa de saber la respuesta que tendrá en las personas que no coincidieron al lanzamiento del libro, así como a la película dirigida por Alfonso Arau, estrenada en 1992, ganadora de 10 premios Ariel incluido el de Mejor Película.
Aunque la actriz originaria de Veracruz reconoció que disfruto de ésta, resaltó el valor de la serie. "La película me encanta pero esto nos da más oportunidad de expresar", mencionó apuntando al formato.
Asimismo, hizo hincapié en que al tratarse de un clásico de la literatura mexicana, es importante darle nuevas interpretaciones.
"Vale la pena volverlos a hacer. Ojalá lo vuelvan a hacer en otros 30 años, porque tiene la suficiente riqueza para ser vuelto a examinar y encontrar cosas nuevas".