César Arturo Méndez Lizárraga lleva 19 años de su corta vida tocando el violín, el cual le ha dado la oportunidad de interpretar piezas importantes de compositores que marcaron una era en la música clásica. Actualmente es uno de los integrantes de la recientemente integrada Orquesta de Cámara de Mexicali, la cual está conformada por artistas de entre 15 y 29 años. El joven de 24 años empezó a tomar clases desde los 5 años, cuando sus padres le inculcaron que debía realizar una actividad cultural.
Inicialmente él quería tocar la flauta transversal, pero tuvo que aprender a interpretar el violín, ya que era más adecuado a su estatura de aquel entonces. Al iniciar con su formación fue fácil valorar el papel de la música en su vida, lo cual aprendió gracias a sus profesores. Recuerda que fueron tres maestros los que han marcado su aprendizaje y su perspectiva al momento de apreciar esta forma del arte. Su primer profesor de violín, René, un médico de profesión, impactó su vida motivándolo a dar lo mejor de sí mismo al interpretar una pieza.
Casualmente, hoy en día César Arturo también es médico y realiza su servicio social. “Él fue el que me empujó a dar ese extra, ese estímulo que uno no recibe a esa edad, hasta que llega le maestro adecuado”. Después, fue el maestro Omar Hernández quien le dio seguimiento a la formación artística, a quien debía visitar a la hermana ciudad de Tijuana. Él le dio un mayor panorama de los alcances del instrumento y a profesionalizarse.
“Fue él que le hizo dar ese salto de niño a tener un enfoque más musical y técnico”. Quien está a cargo de continuar con la formación musical de César Arturo es la maestra Nonna Alakhverdova, quien imparte clases a los estudiantes de la licenciatura en Música en el Campus Ensenada de la Universidad Autónoma de Baja California.
Ella es quien está a cargo de guiarlo para consolidar la participación del violinista en la Orquesta de Cámara de Mexicali recientemente integrada.