Deudas, un mal necesario para los mexicanos

El 56.9% de los hogares en el país afronta esta problemática financiera

Eduardo Urzagasti | Colaborador

  · miércoles 14 de diciembre de 2022

¿El dinero da la felicidad? Seguro has escuchado esta pregunta antes y probablemente tienes una opinión al respecto, ya sea a favor o en contra. Aunque, más allá de poseer una respuesta “correcta”, lo cierto es que para gran parte de las personas en el mundo tener una buena estabilidad económica es un aspecto clave en su vida.

Sin embargo, hay diversos factores que causan que los individuos tengan que afrontar uno de los problemas financieros más comunes para poder subsistir: las deudas. Incluso, hay individuos que llegan a sufrir de sobreendeudamiento, es decir, pagar deudas a través de otras deudas.

Los motivos para que esto suceda pueden ser muchos y depende de cada caso en particular. En México, si bien hay quienes poseen el suficiente dinero para cumplir cualquier deseo o necesidad, hay un 56.9% de los hogares que tienen algún tipo de deuda, ya sea hipotecaria o no hipotecaria (como tarjeta de crédito, créditos de nómina o préstamos personales), esto según la última Encuesta Nacional sobre las Finanzas de los Hogares realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Las cifras de la investigación -realizada en el 2019- evidencia que parte del endeudamiento se debe al rendimiento del dinero, pues un 20.7% de la población mayor de 18 años en el país no le alcanza para lo necesario, a 66.5% si le rinde y únicamente a 12.8% le sobra para ahorrar.

Respecto al detalle por sexo, se indica: “Al 10.5% de la población femenina de 18 años y más declara que le queda dinero para ahorrar, mientras que 15.4% de la masculina indica la misma percepción. Asimismo, 22.8% de las mujeres de 18 años y más señaló que no le alcanza ni siquiera para lo necesario en cambio en los hombres es el 18.3%”.

La situación resulta bastante complicada, ya que, aunado a esto, un estudio realizado por HARO en México afirma que al menos el 11% de los trabajadores destinan hasta el 75 y 100% de su salario para pagar deudas. Por su parte, un 87% reportó pérdida de capacidad de pago por conceptos como intereses moratorios, penalizaciones y reconexiones de servicios.

Cabe destacar que 3.5 millones de los mexicanos que se endeudan -de 9.1 millones que lo hace con créditos informales- utilizan la mayor parte de los recursos para pagar gastos de comida, personales, servicios de electricidad o luz, problemas de salud y hasta educación; según el Inegi.

Por su parte, 4 millones 307 mil 335 adultos, que adquirieron créditos de nómina o personal con alguna institución formal, usan el dinero para comida o pagar servicios, así como para mejorar o remodelar su casa o comprar un coche. Mientras, un 15% lo utilizan para pagar otra deuda.

La inflación y su impacto en la población

Uno de los mayores enemigos que debe atacar un Gobierno, no solo en México sino en cualquier parte del mundo, es el alza de la inflación. En el país, este dato se ubicó en un 8.41% en octubre. Si bien mostró una ligera moderación, la inflación subyacente continuó con su tendencia ascendente y alcanzó un nivel de 8.42%.

Ante esta situación, el Banco de México decidió aumentar la Tasa de Interés Interbancaria a 10.00% a partir del pasado 11 de noviembre, lo que representa su mayor nivel histórico. La medida también se llevó a cabo tras considerar algunos aspectos externos que pueden repercutir en la política monetaria; entre ellos se encuentran la reducción de las condiciones financieras globales y la acentuada incertidumbre, sin olvidar las presiones inflacionarias derivadas tanto de la pandemia, como del conflicto geopolítico por la invasión de Rusia a Ucrania.

Es importante señalar que uno de los sectores donde más se refleja la inflación es el segmento de los alimentos. En octubre, por ejemplo, el precio del jitomate creció un 18.80% y el kilogramo de tortilla subió un 1.62%. Asimismo, en comparación con el cierre de octubre de 2021, la variación de precios en alimentos y bebidas fue de 13.95%.

En esa misma línea, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social señaló que el precio de la canasta básica, hasta septiembre, aumentó casi 15% respecto al mismo periodo del año pasado. En detalle, manifiesta que el gasto promedio en zonas urbanas asciende a un aproximado de 2 mil 144 pesos mensuales y en las zonas rurales sería de 1 mil 625 pesos.

No obstante, según cifras oficiales, la canasta básica estaría en 1 mil 129 pesos. Ante esto, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una nueva versión del Paquete contra la Inflación y Carestía, la cual busca homologar los precios de 24 productos y la ubicarla en 1 mil 039 pesos hasta el 28 de febrero de 2023, lo que sería una baja de 8%.

En medio de esta noticia, la Confederación Patronal de la República Mexicana también propuso subir casi 26 pesos el salario mínimo diario para 2023, lo que sería un alza del 15%, casi el doble de la inflación. Con esto, se pasaría de 172.87 pesos diarios a 198.80 pesos.

Según el ente, lo que se busca es que con dos salarios mínimos se alcance para que una familia de cuatro personas tenga acceso a la canasta alimentaria y a la no alimentaria, lo cual esperan cumplir, a más tardar, en el 2026.

Sin embargo, advirtieron que se debe procurar que este incremento no impacte en la inflación ni en la informalidad, pues el 57.7% de la población en el país se desenvuelve en el sector informal. En este sentido, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi, 32 millones de personas trabajan en este tipo de modalidad.

A partir de todos estos datos se puede ver como las deudas, más allá de ser una decisión personal, se ha convertido en un mal necesario para poder sobrevivir a situaciones externas que no se pueden controlar; pero, aun así, es importante tratar de analizar los pros y los contras y que esta solución inmediata no se transforme en un problema a futuro.

Fuente: Eduardo Urzagasti, Content Writer de www.mejortrato.com.mx