Una buena almohada ayudará a que realmente puedas descansar al dormir, aquí te decimos cómo escoger la ideal para cubrir tus necesidades.
Escoge según tu postura
La altura de la almohada dependerá de tu postura al dormir, considerarla evitará que sufras de dolores en el cuello.
Si duermes de lado, asegúrate de que tu almohada tenga una altura media, pues ayudará a que tu cuello no cuelgue o se incline de más.
Si acostumbras dormir boca arriba, debes asegurarte que la altura de la almohada logre mantener alineada tu cabeza y cuello.
Si duermes boca abajo se recomienda que tu almohada sea de firmeza baja o ligera, pues tu cabeza no debe quedar más alta que tu cuello.
Al comprar…
Revisa su firmeza oprimiendo la almohada con la palma de tu mano hasta la mitad de su altura, mientras más presión necesites, más firme es la almohada.
Considera tu temperatura corporal al dormir, si ésta es alta; debes buscar una almohada que transpire, generalmente son aquellas hechas a base de plumas de ganso y trozos de poliuretano suave.
Consideraciones
Recuerda lavar tus almohadas antes de estrenarlas, debido a que durante su confección se someten a procesos químicos, lo cual puede provocar irritaciones o molestias en la piel.
Si bien no hay un tiempo estimado para cambiar tu almohada, sabrás cuándo hacerlo cuando esta haya perdido firmeza y altura.
Prolonga su vida útil
Es recomendable dar un esponjado diariamente, puedes hacerlo al tender tu cama por las mañanas
Utiliza una funda para protegerla y sigue las instrucciones de lavado de tu almohada, ya sea que puedas o no lavarla en un ciclo de lavadora.
Con información de Profeco