La escena independiente del gaming es por lo regular un hervidero de nuevas ideas, que toma riesgos que otros no se atreverían a tomar. Ese es el caso del juego debut del estudio francés Sand Door, que ha creado en Lysfanga un hack and slash que se convierte en un profundo puzzle con la sola genialidad de su innovador sistema de combate.
Lysfanga: The Time Shift Warrior es una tremenda aventura de acción que cuenta una épica historia mezclando aspectos de fantasía y ciencia ficción, pero que en su núcleo es un constante acertijo que debe de ser resuelto con su mecánica de generación de clones para superar combates y escenarios que parecen imposibles.
La mítica historia del juego nos pone en la tierra de Antala, un reino que tuvo que soportar hace cientos de años un terrible suceso llamado “La Calamidad”, en el que una una invasión de bestias llamadas Raxes puso en peligro la existencia completa de este pueblo. Afortunadamente la Diosa Qhomera utilizó sus poderes para congelar en el tiempo toda la región y dejar escapar a su gente.
Cada generación un guerrero es nombrado “Lysfanga” para proteger Antala y en está ocasión eso servirá su cometido pues una nueva amenaza pretende romper el hechizo del tiempo para volver a liberar a los Raxes.
Aquí es donde entra Ime, la heroína de esta historia, quien no solo es nombrada Lysfanga, si no que también recibirá los poderes de la Diosa para manipular la temporalidad y generar copias de sí misma, para poder así plantarle cara a las hordas interminables de enemigos.
El gameplay te pone desde la perspectiva isométrica en escenarios minuciosamente diseñados, en los cuales deberás eliminar a todos los enemigos que están plantados en zonas específicas de la arena, todo con un límite de tiempo. Lo cual sería imposible en un simple hack and slash.
Aquí es dónde entra el gancho principal del título: cada que el cronómetro se detiene, el juego te regresa al inicio reseteandolo todo, pero dejando el “Eco” de tus acciones anteriores en el escenario. Haciendo posible que en la segunda vuelta hagas cosas diferentes para progresar al mismo tiempo en que se repite lo que hicieron tus versiones previas.
Esta simple mecánica se convierte en una épica genialidad con el progreso del juego, pues poco a poco los requerimientos para avanzar en cada arena se irán volviendo más complicados. Desde agregar la necesidad de eliminar enemigos en un orden específico, hasta tener que abrir puertas en uno de tus runs para que tu versión del futuro aproveche el acceso.
Inclusive los jefes del juego requerirán de toda tu imaginación para idear las formas en que puedas mezclar las tres armas disponibles y ayudarte a ti mismo mientras vas agregando más y más capas de tu propio gameplay en un mismo bucle de tiempo,
La historia principal de Lysfanga: The Time Shift Warrior se puede superar en alrededor de 10 horas, pero los desarrolladores están totalmente conscientes de que perfeccionar cada nivel se vuelve una tarea placentera y es por eso que han agregado versiones con modificadores para repasar cada nivel y así obtener el 100% del juego.
Además tiene unos gráficos llenos de estilo que se vuelven un espectáculo de partículas y centellas cuando la pantalla está llena de tus clones. Y lo responsivo de sus controles más la rapidez de sus cargas lo hacen perfecto para no desesperarte con cada intento de prueba y error.
Lysfanga es un juego adictivo y muy original que se ha metido desde ya entre los mejores independientes del año. Si estás buscando un juego de acción que te empuje al máximo para encontrar los mejores cursos de acción y esa run inmejorable, no hay mejor opción. Además ya está disponible para PC en Steam y la Epic Store y no nos sorprendería que tenga un impacto superior en el momento en que llegue a consolas.